Homenaje en Guantánamo a víctimas del 11-S, cerca de la cárcel donde está el "cerebro" de atentados

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Bajo el cielo azul del Caribe, familiares de las víctimas de los ataques del 11 de septiembre de 2001 se reunieron el sábado para una ceremonia en la base naval estadounidense de la Bahía de Guantánamo, Cuba, conscientes de que el autor intelectual de los atentados estaba en una celda a pocos kilómetros de distancia.

"En esta instalación naval, más que en cualquier otro sitio del mundo, recordamos esto todos los días", dijo el comandante de la base, el capitán Samuel White, en un servicio religioso con motivo del vigésimo aniversario de los ataques.

En Guantánamo, Jalid Sheij Mohamed y otras cuatro personas están siendo procesados por los ataques del 11 de septiembre en audiencias que han durado nueve años y que aún se encuentran en la fase previa al juicio, poniendo a prueba la paciencia de miles de personas que perdieron a sus seres queridos ese día.

En la capilla, Elizabeth Berry, cuyo hermano bombero Billy Burke murió en el World Trade Center el 11 de septiembre, habló de todos los fallecidos aquel día, especialmente de los bomberos que evacuaron las torres gemelas después de que los secuestradores de Al Qaida chocaran contra ellas con aviones en el marco de la operación diseñada por Mohamed.

"Hubo muchos héroes ese día", le dijo a la audiencia. "En uno de los peores días de nuestra historia, vimos lo mejor de la humanidad".

Camiones de bomberos custodiaban la entrada a la capilla ubicada en la cima de una colina para honrar a los 343 soldados del fuego de Nueva York que murieron ese día.

En el interior, una mesa exhibía uniformes de algunos de los bomberos muertos y piezas recogidas de las torres derruidas.

Al igual que Berry, familiares de Sean Canavan, un carpintero que también falleció en las torres, viajaron a Guantánamo para asistir a las audiencias y se quedaron para los actos conmemorativos del aniversario.

"Debido a estos ataques, nunca conocí a Sean, quien habría sido mi padrino", dijo Liam Canavan, sobrino del fallecido y nacido después de los ataques.

"Lo único que trae paz a mi familia es saber que los hombres responsables de tanto dolor están encerrados aquí en la Bahía de Guantánamo y nunca volverán a causar dolor", dijo.

pmh/dg/lda

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