Lionel Messi firmó finalmente el martes por la noche su esperado contrato con Paris Saint-Germain, para completar el traspaso que confirma el fin de su larga asociación con Barcelona y lanza una nueva era en el fútbol francés.
PSG informó en una declaración que el astro argentino de 34 años firmó un contrato de dos campañas, con la opción de una tercera temporada.
“Estoy emocionado de comenzar una nueva etapa de mi carrera en el París Saint-Germain", dijo Messi. "El club y su visión están en perfecta armonía con mis ambiciones. Sé lo talentoso que es el equipo. Estoy decidido a construir junto a ellos algo grande para el club y la afición y estoy deseando salir al campo del Parque de los Príncipes”.
No se dieron cifras salariales, pero una persona con conocimiento de las negociaciones le dijo a The Associated Press que el jugador va a ganar alrededor de 35 millones de euros (41 millones de dólares) por año. Esa persona solicitó permanecer anónima, debido a que el contrato no se firmaba todavía.
“Estoy deleitado de que Lionel Messi haya decidido sumarse al Paris Saint-Germain y estamos orgullosos de dar la bienvenida a él y su familia a París”, dijo el presidente del PSG, Nasser Al-Khelaifi. ”Él no ha ocultado sus deseos de seguir compitiendo el mayor nivel y ganando trofeos y naturalmente esa es nuestra ambición como club”.
Resulta un hecho simbólico el que Messi vaya a usar el número 30. Fue el mismo que llevó en los dorsales durante sus primeras dos temporadas con el Barcelona, antes de emplear el 19 y luego el 10, que Neymar ocupa actualmente con el club parisiense.
Miles de hinchas se congregaron en el aeropuerto Le Bourget al norte de París para recibir a Messi, quien vestía una camiseta con la leyenda “Ici c'est Paris” —Esto es París—.
Las palabras suelen ser coreadas por los aficionados en el Parc des Princes, donde Messi será presentado el sábado, antes del puntapié inicial de encuentro ante el Estrasburgo.
Fue tal el fervor generado por el arribo de Messi que la policía debió empujar con fuerza para evitar que las barreras metálicas cayeran ante la presión de los espectadores que se acercaron al aeropuerto en busca de mirar de cerca al astro argentino.
Messi se dirigió de la terminal aérea a París escoltado por la policía.
La incredulidad por fichar a uno de los más grandes futbolistas de la historia se fue transformando en entusiasmo. Muchas personas se reunieron en las proximidades del estado para mirar a Messi, quien los saludó brevemente y a lo lejos antes de someterse a una revisión médica.
Más temprano, Jorge Messi, padre y agente del jugador, había confirmado que su hijo llegaría al PSG, durante una breve charla con los reporteros en el Aeropuerto Josep-Tarradellas Barcelona-El Prat, antes de que el crack abordara su vuelo vespertino.
Messi llegó con su esposa y sus tres niños, y abordó un jet privado.
Los seguidores del PSG han atestiguado la transformación de su club durante la última década, tras la inyección de inversiones de un fondo soberano de Qatar, vinculado con el emir.
Una vez que expiró el contrato de Messi con el Barcelona, que no podo costear la permanencia del astro, PSG quedó como uno de los pocos clubes capaces de financiar un convenio colosal para hacerse de los servicios del jugador seis veces premiado con el Balón de Oro.
La llegada de Messi da al club capitalino opciones formidables de ataque. Se asociará con Kylian Mbappé, campeón del último Mundial con Francia, y con el brasileño Neymar, su excompañero en el Barça.
“Juntos otra vez”, publicó Neymar en Instagram.
Mientras que el PSG tuvo que pagar 222 millones de euros para adquirir a Neymar (entonces 261 millones de dólares) de Barcelona en el 2017, no hubo pago por el traspaso de Messi.
El astro se convirtió en el jugador libre más deseado de la historia del fútbol después de que su contrato con el Barcelona expiró. El club azulgrana había confiado en retener a Messi, que aceptó una reducción de sueldo, pero aún así no habría cumplido con las normas financieras de La Liga española.
El técnico del PSG, Mauricio Pochettino, se puso en contacto con su compatriota cuando el Barcelona anunció el pasado jueves que Messi dejaría el club al que llegó con 13 años, y con el que ganó todos los grandes trofeos y varios galardones a jugador del año.
El PSG tiene esperanzas de que Messi no solamente ayude al equipo a recuperar el título de la liga francesa que perdió la temporada pasada ante Lille, sino también la elusiva Liga de Campeones.
Si el PSG usa una formación de 4-3-3, pudiera tener un ataque encabezado por Messi en la derecha, Neymar en la izquierda y Mbappe como centrodelantero.