IZU, Japón (AP) — Italia batió su propio récord mundial el miércoles al imponerse a Dinamarca en la final olímpica de persecución masculina por equipos, remontando en la última mitad de la carrera para superar al equipo que ha dominado la disciplina en el último año.
Los italianos — Simone Consonni, Filippo Ganna, Francesco Lamon y Jonathan Milan — superaron una desventaja de casi medio segundo en las cinco últimas vueltas de las 16 de la prueba.
Su tiempo, 3:42.032, les valió para superar a los reinantes campeones mundiales, que pararon el crono en 3:42.203 en una dramática final en el velódromo de Izu.
Australia, subcampeona olímpica en Río, se adjudicó el bronce. Los australianos disputaban una ajustada carrera con Nueva Zelanda cuando un toque en una de sus ruedas provocó la caída de los “kiwis” dejándolos fuera de la contienda.
El equipo danés, formado por Lasse Norman Hansen, Niklas Larsen y Rasmus Pedersen, estuvo por detrás en la primera mitad de la final y llegó a acumular una ventaja de medio segundo a falta de 1,25 de los 4 kilómetros de la prueba.
Pero con Ganna tirando al frente, Italia recortó la distancia en la última vuelta y consiguió su primer oro en la disciplina desde los Juegos de Roma en 1960.
En la competición femenina, las chinas Bao Shanju y Zhong Tianshi, que causaron controversia al recibir su oro en velocidad por equipos con una insignia del Mao Zedong, líder fundador de la China comunista, regresaron el velódromo para la prueba de keirin, una disciplina en la que las participantes siguen a una bicicleta con motor, llamada derny, mientras van tomando velocidad. Cuándo ésta se retira, se lanzan en un sprint hasta la meta.
Zhong acabó tercera en su eliminatoria, pero avanzó a los cuartos de final del jueves cuando la británica Katy Marchant fue relegada. Bao fue cuarta en su serie y quedó fuera de la competencia al terminar última en el repechaje.
Marchant si sobrevivió a la repesca, como la alemana Emma Hinze, vigente campeona del mundo.