MIAMI GARDENS, Florida, EE.UU. (AP) — Un tobogán en las nuevas instalaciones de los Dolphins de Miami llevará rápidamente a los jugadores del segundo piso a la sala de pesas en el primer nivel.
Todo sea por acelerar el proceso de construir un equipo campeón.
Los Dolphins inauguraron el martes el complejo que tuvo un costo de 135 millones de dólares, una semana antes del inicio de los campamentos de entrenamiento. El centro se ubica junto al estadio de los Dolphins, a ocho millas (13 kilómetros) al sur de Davie, el lugar donde el equipo ha entrenado desde 1993.
“Es un sueño hecho realidad para mi”, dijo el dueño Stephen Ross. “Hemos viajado por el país, vimos lo mejor de todos los equipos y armamos esto. Esperemos que los jugadores se inspiren. Si no puedes ganar con unas instalaciones como estas, nunca vas a ganar”.
Junto al tobogán de 30 pies (9.14 metros), avalado con entusiasmo por Ross, los jugadores contarán con una zona de descanso, un barbero, una zona para lanzar dardos y 209 televisores.
Hay dos auditorios, el más amplio con capacidad de 176 personas y un área de comida para 158. El área de entrenamiento interior cuenta con cuatro piscinas.
La zona circundante es subtropical, gracias a las nueve especies de palmeras.
El coach Brian Flores indicó que los jugadores están entusiasmados con el nuevo centro y le agradecieron a Ross y al presidente Tom Garfinkel.
“Tenían una visión”, dijo Flores. “Hoy la convirtieron en realidad”.
A la inauguración asistieron 15 exjugadores y algunos, incrédulos, menearon la cabeza, al percatarse de cuánto ha avanzado la franquicia. El safety elegido dos veces All-Pro Dick Anderson fue novato en 1968, cuando los Dolphins cumplían su tercer año con el dueño Joe Robbie.
“Lo peor eran las reuniones matutinas en el vestuario y sin sillas con respaldo. Luego íbamos al estadio de béisbol de Miami y ahí entrenábamos en la tierra”, dijo Anderson al revisar el nuevo complejo.
“No creo que nadie tiene algo como esto".