LA HABANA (AP) — El Laboratorio Antidoping de Cuba trabaja intensamente para los Juegos Olímpicos de Tokio con muestra de varios países latinoamericanos y ya encontró al menos siete positivos en sustancias prohibidas en esta temporada, indicó el máximo encargado de la institución.
La dependencia “sigue dando servicio a todas las organizaciones antidopaje de Latinoamérica que tienen convenio con nosotros, así como federaciones internacionales que están llevando tomas de muestra”, dijo a un pequeño grupo de periodistas Rodny Montes de Oca, el director. “Contamos con todos los equipamientos y reactivos”.
Montes de Oca aclaró que en lo que va del año y ante la cercanía de las olimpiadas se analizaron entre 1.300 y 1.400 muestras de atletas de la propia isla como de México, Panamá y Chile, entre otras naciones. No especificó la procedencia de los casos positivos, pero aseguró que ninguno fue de Cuba.
Creado en 2001, el laboratorio depende del Instituto de Medicina Deportiva y es uno de los 27 especializados con certificación internacional que hay en todo el mundo, de los cuales solo cinco están en las Américas --dos de ellos en Estados Unidos.
El instituto procesa entre 30 y 50 muestras diarias, aunque el año pasado se vio afectado la baja de la actividad deportiva ocasionada por la pandemia del coronavirus.
En el caso de encontrar positivos, el laboratorio tiene la obligación de informarlo no solo a las federaciones o comités que levantaron la muestra, sino a los organismos antidopaje internacionales, explicó Montes de Oca.
En algunos casos suelen detectarse sustancias prohibidas pero que venían en algún medicamento por que el atleta estaba autorizado por enfermedad a tomarlas. En otras se investiga y los deportistas presentan litigios, agregó el directivo.
En el caso de la delegación cubana que se prepara para Tokio, Montes de Oca, indicó que está conformada por unos 43 participantes en diversas disciplinas y se espera que pueda llegar a 70 personas con boletos para competir la máxima cita.
“En Cuba se les realiza entre dos y tres controles a cada atleta previo a la salida a cada juego multidisciplinario”, explicó. “¿Qué garantizamos con esto?, que el atleta sepa que se está llevando a cabo un monitoreo sistemático de él y por lo tanto evite el uso de sustancias prohibidas”.
Montes de Oca destacó que de todas maneras la responsabilidad individual es única, de cada deportista, por lo que también se les da charlas educativas para evitar el dopaje accidental o alguna trampa a la que los hagan incurrir competidores inescrupulosos.
Además, manifestó, algo que está “de moda ahora en la lucha antidopaje es la utilización del pasaporte biológico”, o sea detectar las “huellas” de sustancias prohibidas en el organismo.
“Si usted antes de estos seis meses le ha tomado tres muestras a este atleta y han resultado negativas se supone que cuando se analice su pasaporte biológico en Tokio, no haya ninguna modificación”, manifestó.
——————-
Andrea Rodríguez está en Twitter: www.twitter.com/ARodriguezAP