NUEVA YORK (AP) — Investigadores federales ejecutaron el miércoles órdenes de registro en la oficina y la casa de Rudy Giuliani en Manhattan, e incautaron computadoras y teléfonos, como parte de la pesquisa del Departamento de Justicia sobre los negocios del exabogado personal del expresidente Donald Trump.
Giuliani, de 76 años y exalcalde de la ciudad de Nueva York que en su momento fue elogiado por su liderazgo tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, ha estado bajo la lupa de las autoridades federales por varios años debido a sus vínculos con Ucrania. Los allanamientos representan el mayor indicio a la fecha de la posibilidad de cargos federales.
Los investigadores ejecutaron los registros en la casa de Giuliani en la avenida Madison y en su oficina en Park Avenue, informaron a The Associated Press personas al tanto de la pesquisa. Las órdenes de allanamiento, que requieren de la aprobación de altos mandos del Departamento de Justicia, significan que los fiscales creen que existe causa probable de que Giuliani cometió un delito federal, aunque no son garantía de que se presenten cargos.
También se ejecutó una tercera orden por un teléfono perteneciente a la abogada Victoria Toensing de Washington, quien trabajó como fiscal federal y es aliada cercana de Giuliani y Trump. Su despacho emitió un comunicado en el que indicó que fue informada de que no es blanco de la investigación.
La extensión completa de la investigación no está clara, pero por lo menos involucra parcialmente los acuerdos de Ucrania, informaron a la AP funcionarios policiales.
Las personas que detallaron los allanamientos y los eventos del miércoles hablaron con la AP bajo condición de anonimato al no estar autorizadas a discutir el caso de manera pública. El diario The New York Times fue el primero en reportar la noticia.
En un comunicado difundido a través de su abogado, Giuliani acusó a las autoridades federales de una “doble moral corrupta”, haciendo referencia a acusaciones en contra de demócratas de alto rango, y dijo que el Departamento de Justicia “pisoteaba los derechos constitucionales de cualquier persona involucrada, o que defiende legalmente, al expresidente Donald J. Trump”.
“El señor Giuliani respeta la ley, y puede demostrar que su comportamiento como abogado y como ciudadano fue totalmente legal y ético”, asegura el comunicado.
Un portavoz del Departamento de Justicia no respondió de momento a una solicitud de comentario. La oficina de la fiscalía federal en Manhattan y la oficina del FBI en Nueva York se negaron a comentar el miércoles al respecto.
La pesquisa federal sobre los nexos de Giuliani con Ucrania se estancó el año pasado debido a una disputa en torno a las tácticas de investigación en momentos en que Trump buscaba infructuosamente su reelección. Subsecuentemente, Giuliani asumió un papel protagónico en impugnar los resultados electorales a nombre de los republicanos.
Los allanamientos del miércoles se llevaron a cabo meses después de que Trump dejó el cargo y perdió su capacidad para indultar a sus aliados por ofensas federales. El mismo exmandatario ya no goza de las protecciones legales que alguna vez le otorgó la Oficina Oval, aunque no hay indicios de que Trump sea parte de esta investigación.