LA PAZ, Bolivia (AP) — El gobierno del presidente de Bolivia, Luis Arce, propuso que la Organización de Naciones Unidas tenga “un rol protagónico” ante la escasez de vacunas contra el nuevo coronavirus a nivel mundial.
“En estos momentos de pandemia, la ONU ha sacado unos comunicados que nos dicen ‘qué pena que te sientas mal’, pero no nos da soluciones”, dijo el viernes el canciller Rogelio Mayta en un encuentro con medios internacionales. “Tiene que retomar su rol protagónico”, agregó.
Su despacho inició el martes pasado una campaña que pide la liberación de patentes para que haya una mejor distribución de los inoculantes a países que aún no cuentan con ellos o que sufren retrasos en las entregas por la fuerte demanda mundial.
Bolivia hizo contrataciones con Rusia para la compra de 5,1 millones de Sputnik V, 5 millones de AztraZeneca, 5 millones por el mecanismo COVAX, promovido por la ONU y la Organización Mundial de la Salud, y unas 700.000 de la china Sinopharm.
Mayta reconoció el retraso de llegada de los inyectables al país. “Rusia se ha comprometido a enviarnos un mayor lote de vacunas. Se ha retrasado porque está dando prioridad a su pueblo”, dijo.
Por ello, el gobierno boliviano gestiona otras vacunas como la cubana Soberana II, que está en la tercera fase de prueba. “Estamos esperando que cumpla con los requisitos satisfactoriamente, pero eso no va a ser inmediatamente. Sin embargo, varios países ya están interesados”, agregó Mayta al respecto.
Bolivia, con una población de más de 11 millones de habitantes, había recibido 948, 000 vacunas, informó Mayta. “Hasta la fecha se ha utilizado el 60%”, agregó.
El país pasa por un aumento de contagios del nuevo coronavirus. Las regiones de Santa Cruz y Beni, fronterizas con Brasil, son las más afectadas. Autoridades de salud sospechan que el incremento se debe a la posible presencia de la nueva variante del virus que circula en Brasil.
Hasta el viernes, Bolivia había reportado 286.114 contagios y 12.603 decesos por COVID-19.