DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP) — Las economías de Oriente Medio se están recuperando de la pandemia de coronavirus más rápido de lo previsto, en gran parte debido a la aceleración de las campañas de inoculación masiva y al aumento de los precios del petróleo. Pero el Fondo Monetario Internacional advirtió el domingo que una distribución desigual de las vacunas podría descarrilar el repunte de la región debido a que hay diferentes perspectivas para los países ricos y pobres.
En su último informe, el FMI volvió a revisar al alza sus perspectivas económicas para 2020 para el Medio Oriente y África del Norte. Ahora esboza solo una contracción del 3,4% el último año, gracias a un auge de las materias primas y el aumento del precio del crudo, que llegó a 67 dólares el barril en marzo. Incluso si el precio cae a 57 dólares el barril para fines de 2021, la intensa recuperación está impulsando a las naciones petroleras del Golfo Pérsico como Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí, que también han acelerado la vacunación contra el COVID-19.
Pero en otras partes de la región, desde Yemen y Sudán hasta Libia y Líbano — donde persisten la inflación, la inestabilidad y las guerras — los efectos dañinos de la pandemia se prolongarán y causarán daños económicos en los años por venir, dijo el FMI.
“Estamos en un año de crisis y la recuperación ha vuelto, pero es una recuperación divergente”, dijo a The Associated Press Jihad Azour, director del departamento de Oriente Medio y Asia Central del FMI. “Estamos en un punto de inflexión... La política de vacunación es política económica”.
El FMI espera que el crecimiento económico sea de 4% para Oriente Medio este año.