MIAMI (AP) — Una jueza federal de Miami fijó el viernes una nueva fecha para la audiencia de extradición del exgobernador mexicano César Duarte, requerido en su país por varios delitos de corrupción.
La audiencia será el 26 de enero, de acuerdo a la decisión de la jueza Lauren Fleischer Louis publicada en el expediente online del caso judicial. La magistrada había fijado fecha anteriormente para el 14 de enero y para el 10 de noviembre, pero en ambas oportunidades la pospuso.
Duarte, quien ejerció como gobernador del estado mexicano de Chihuahua entre 2010 y 2016, permanece detenido en una prisión federal del centro de Miami desde que fue detenido a comienzos de julio de 2020. La jueza ha rechazado su pedido de libertad bajo fianza.
El exfuncionario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), está acusado de peculado y asociación delictuosa. Desde por lo menos 2018 era buscado por corrupción y malversación de millones de dólares de fondos públicos.
Duarte alega que llegó a Estados Unidos en 2016 en busca de atención médica tras un accidente en helicóptero. Asegura que desconocía en ese momento que enfrentaba acusaciones en su país. Vive en Miami desde 2017 y sostiene que las acusaciones tienen motivaciones políticas y por eso ha pedido asilo en Estados Unidos.
Washington recibió el pedido de detención de Duarte en diciembre de 2019.
Sus abogados han dicho que debido a la pandemia se les ha hecho difícil preparar el caso de extradición porque hay restricciones para las visitas en las cárceles.
El exgobernador ha presentado pruebas para demostrar que ha cooperado con Estados Unidos, pero permanecen selladas, sin acceso al público.
La fiscalía ha presentado como pruebas cartas diplomáticas y una orden firmada por un juez mexicano, para fundamentar su alegato de que las acusaciones están vigentes y que de acuerdo con las leyes del vecino país los acusados no pueden ser enjuiciados en ausencia.
En un documento presentado el jueves, los fiscales pidieron a la jueza que al momento de tomar una decisión sólo considere el hecho de que las acusaciones existen en México porque no le corresponde a la justicia estadounidense indagar sobre la culpabilidad o inocencia de esos supuestos delitos.
“Duarte debería tener la oportunidad de poner a prueba sus alegatos en el foro apropiado: el tribunal mexicano”, consideró la fiscalía en un documento de 14 páginas.