Insertar un nuevo disco duro en el ordenador normalmente no es problema. Al reiniciar el sistema, sin embargo, suele suceder que la nueva unidad no aparece en el Explorador de archivos de Windows. Esto no significa que el disco duro o SSD esté estropeado. En la mayoría de los casos, el problema radica en que la unidad no ha sido inicializada. Para ello, hacer clic con el botón derecho del ratón en el botón de inicio de Windows, que se encuentra en la esquina inferior izquierda de la pantalla, y seleccionar la llamada "Administración de discos". Una vez allí se busca en la parte inferior de la pantalla el nuevo disco, que estará marcado como "No inicializado". A continuación, se hace clic con el botón derecho del ratón en el mismo y se selecciona "Inicializar disco" en el menú. En el cuadro de diálogo es necesario confirmar el estilo de partición preseleccionado, "GPT", y hacer clic en "OK". A continuación, la unidad solo deber ser formateada e identificada con una letra. Ambos pasos funcionan mediante un clic derecho en la unidad correspondiente en el listado que aparece en la zona superior de la pantalla. Una vez finalizado el proceso, el nuevo disco duro o SSD se encontrará como de costumbre en el Explorador con la letra que le haya sido asignada. dpa