SEÚL (AP) — ¿Qué pasó con Kim Yo Jong, la influyente hermana del máximo líder de Corea del Norte?
Esto es lo que se preguntan muchos observadores ante la ausencia de su nombre en la nueva lista de integrantes del Politburó.
Hay quienes dicen que Kim Jong Un puede haber degradado a su hermana, preocupado tal vez por su creciente popularidad e influencia en momentos en que trata de afianzar su autoridad para hacer frente a los problemas económicos del país.
Las versiones de que Kim Yo Jong es la potencial heredera de su hermano son peligrosas porque “pueden generar dudas acerca del poder de Kim y de su salud”, opinó Oh Gyeong-seob, analista del Instituto para la Unificación Nacional de Seúl. Es por ello que Kim Jong Un frena un poco la proyección política de su hermana.
La novedad es una sorpresa porque se esperaba que Kim Yo Jong, quien fue admitida como suplente en el Politburó el año pasado, sería confirmada como miembro pleno durante el congreso del Partido de los Trabajadores que terminó el martes. Toda figura con ambiciones debe pasar por el Politburó, el organismo al que consulta Kim Jong Un antes de tomar las grandes decisiones.
Cuando arrancó el congreso de ocho días la semana pasada, Kim Yo Jong, quien se cree tiene 32 años, ocupaba un lugar en el podio de los líderes, sobresaliendo entre cuadros mayormente ancianos y hombres. Pero cuando se anunció la lista de los 30 miembros titulares y suplentes del Politburó, su nombre no figuraba.
Kim Yo Jong sigue siendo miembro del Comité Central del PT, otro órgano importante. Pero cuando difundió un comunicado criticando a Corea del Sur el miércoles, se la identificó como una “vicedirectora de departamento”, un puesto de nivel intermedio.
Kim Jong Un trata de sortear “las peores” dificultades que ha tenido este país de 25 millones de habitantes. Corea del Norte padece problemas económicos asociados con el coronavirus, una serie de desastres naturales y el impacto de las sanciones de Estados Unidos por el programa nuclear norcoreano.
“El propósito del congreso fue solidificar el liderazgo de Kim Jong Un. Si Kim Yo Jong hubiese sido admitida como miembro pleno del Politburó, toda la atención se habría enfocada en ella”, declaró el lunes Ko Young-hwan, exvicedirectora de Estrategia de Seguridad Nacional, un grupo de estudios supervisado por la agencia de espionaje sudcoreana, en un programa de televisión.
Los hermanos Kim son la tercera generación de la dinastía que gobierna Corea del Norte desde hace décadas. Su liderazgo es herencia del culto a la personalidad que comenzó con su abuelo Kim Il Sung, fundador del país en 1948.
Kim Yo Jong ganó proyección internacional al acompañar a su hermano en sus encuentros con Donald Trump y otros líderes mundiales en el 2018 y el 2019. Su cercanía con su hermano hizo pensar que era su jefa de despacho.
En Corea del Sur se hizo fama de “mensajera de la paz” tras asistir a la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Invierno del 2018 en Pyeongchang. Fue la primera integrante de la familia gobernante que visita Corea del Sur desde la guerra coreana de 1950-53.
El año pasado, sin embargo, criticó duramente a los sudcoreanos. La prensa estatal sudcoreana dijo que estaba a cargo de las relaciones con Corea del Sur y más de uno especuló que también se haría cargo de las relaciones con Estados Unidos.
Cuando circularon rumores no confirmados de que Kim Jong Un tenía problemas de salud, muchos pensaron que Kim Yo Jong sería su sucesora si él quedaba incapacitado. La agencia de espionaje sudcoreana dijo ese año que ella era la segunda persona más poderosa de Corea del Norte pero no había sido designada la heredera de su hermano.
“Kim Jong Un probablemente responsabilizó a su hermana por un empeoramiento en las relaciones con Estados Unidos y Corea del Sur”, dijo Kim Yeol Soo, analista del Instituto Coreano de Asuntos Militares de Corea del Sur.
Numerosos expertos consideran que, a pesar de no estar ya en el Politburó, su peso político no ha mermado y no se descarta que su hermano le dé un cargo importante en el futuro.
El analista Oh destacó que Kim Yo Jong es seguramente la segunda mujer más poderosa en la historia de Corea del Norte después de Kim Song Ae, la finada segunda esposa de Kim Il Sung.
“Kim Yo Jong puede reunirse y hablar con Kim Jong Un cuando quiera... No hay duda de que tiene gran influencia”, señaló Oh. “Con el paso del tiempo, su papel aumentará”.
“Pero debe cuidarse” y no mostrarse demasiado ambiciosa, añadió.