LONDRES (AP) — Los proveedores de servicios inalámbricos en Gran Bretaña no podrán instalar equipos de Huawei en sus redes 5G después de septiembre de 2021, informó el gobierno británico el lunes, tomando una postura más dura hacia la compañía tecnológica china.
El plazo es parte de un plan de trabajo que el gobierno británico está estableciendo para retirar a proveedores de equipos de “alto riesgo” con un proyecto de ley que está dirigido a endurecer los requisitos de seguridad de las telecomunicaciones.
En julio, el gobierno del primer ministro Boris Johnson prohibió que Huawei tuviera un papel en la construcción de la siguiente generación de redes telefónicas debido a inquietudes de seguridad desencadenadas por sanciones que le impuso Estados Unidos a la empresa. Gran Bretaña y otras naciones europeas han empezado a seguir los mismos pasos luego de que Estados Unidos presionó a sus aliados para evitar a Huawei por temor de que sus equipos puedan ser utilizados por los gobernantes comunistas de China para espionaje electrónico.
Los operadores de telecomunicaciones recibieron instrucciones de dejar de comprar equipos 5G de Huawei para finales del año y tienen hasta el 2027 para retirar cualquier equipo de la compañía china de sus sistemas.
Aunque la prohibición implica que los operadores tendrían que dejar de instalar equipos de Huawei, el anuncio más reciente fijó claramente el plazo, lo que dificultará que acumulen equipos.
Huawei rechazó hacer comentarios al respecto, pero anteriormente ha rechazado las acusaciones de Estados Unidos y ha dicho que la prohibición de Gran Bretaña tenía motivaciones políticas.
“Hoy estoy fijando un camino claro para el total retiro de vendedores de alto riesgo de nuestras redes 5G”, dijo Oliver Dowden, secretario para asuntos informáticos. “Esto se realizará a través de poderes de identidad nuevos y sin precedentes y prohíbe equipos de telecomunicaciones que representen una amenaza a nuestra seguridad nacional”.
El proyecto de ley de telecomunicaciones, que será objeto de debate en el Parlamento el martes, requiere estándares más estrictos de seguridad para las redes inalámbricas y de fibra óptica de 5G y amenaza con imponer multas considerables a las compañías que no cumplan las reglas.
El gobierno también está estableciendo una estrategia para diversificar sus proveedores de equipos de telecomunicaciones, entre ellos un laboratorio de investigación e inversiones en tecnología de estándares de radio. Huawei tiene un puñado de rivales, como la compañía finlandesa Nokia y la sueca Ericsson, lo que también ha planteado temor de que las redes corran riesgos de vulnerabilidades, al depender de tan pocas compañías para proporcionar infraestructura fundamental.