Por Marco Aquino
LIMA, 23 nov (Reuters) - Perú colocó el lunes deuda en tres tramos por 4.000 millones de dólares, incluyendo su primer bono a plazo de un siglo, en medio de una sólida demanda luego de vivir una de sus peores crisis políticas con tres presidentes en menos de dos semanas.
El director general del Tesoro Público del ministerio peruano de Economía, José Olivares, precisó a Reuters que el nuevo bono "hito" de 1.000 millones de dólares que vence el 2121 se colocó a una tasa cupón de aproximadamente 3,23%, a 170 puntos básicos sobre el bono del Tesoro de Estados Unidos.
Los otros dos fueron el bono 2032 de 1.000 millones de dólares colocado a una tasa cupón de 1,86%, con un diferencial de 100 puntos básicos sobre el bono estadounidense; y el bono 2060 por 2.000 millones de dólares con una tasa cupón de 2,78%, a 125 puntos básicos del rendimiento comparable, refirió.
"Fue un espaldarazo fortísimo del mercado de capitales y de los inversionistas globales", dijo a Reuters el director general del Tesoro Público del ministerio peruano de Economía, José Olivares. "La demanda nos sorprendió gratamente; en el momento pico superó los 15.000 millones de dólares", agregó.
Los bonos peruanos fueron colocados días después de la expulsión de un presidente, la renuncia de otro y la designación del mandatario interino Francisco Sagasti, tras unas protestas que dejaron dos muertos y decenas de heridos.
Olivares afirmó que durante las protestas el mercado reaccionó y hubo volatilidad respecto a los valores de Perú, castigando a sus bonos y moneda, pero luego se estabilizó cuando ingresó el presidente de transición Sagasti que asegura la realización de las elecciones generales el 11 de abril.
"El mercado confía en que la economía va seguir manejándose en base a las prudentes políticas fiscales", manifestó.
Con esta colocación, Perú ingresó al club de los pocos países en el mundo con un bono a plazo de un siglo, entre ellos México, Bélgica, Irlanda, China, Dinamarca o Suecia.
NIVEL DEUDA
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de Perú había publicado el domingo un decreto supremo que autorizaba la emisión, fondos que se destinarán a contener el COVID-19 y financiar parte de su presupuesto público.
El presidente interino Sagasti había anticipado a Reuters la semana pasada que Perú planeaba concretar en el corto plazo la colocación de nuevos bonos para financiar el "altísimo" déficit fiscal y el pago de intereses y obligaciones de antiguos compromisos con vencimiento en el 2021.
"Cuando uno tiene espacio para endeudarse y estás en crisis eso es lo que tienes que hacer", dijo Sagasti.
El ministro de Economía y Finanzas (MEF), Waldo Mendoza, afirmó el lunes en el Congreso que se prevé que el nivel de la deuda aumentará fuertemente tras el histórico estímulo económico lanzado por el Gobierno, que suma hasta un 20% del PIB, para reactivar la producción y frenar la pandemia del coronavirus.
Mendoza precisó que la deuda pública con respecto a la producción nacional aumentará de un 28% del PIB a un 35% a fines de este año y hasta un 38% en el 2021, tal como lo había previsto la anterior ministra en agosto.
Analistas afirman que, con esta salida al mercado con un histórico bono a 100 años, Perú busca aprovechar la coyuntura de tasas bajas en dólares en el mundo. "El MEF lo que está tratando de hacer es distribuir sus vencimientos, de forma disciplinada para no sobreendeudarse", dijo a Reuters el director asociado de renta fija en Scotiabank, Alejandro Guinassi.
La economía de Perú se contraería este año en torno a un 12% según proyecciones oficiales tras las fuertes restricciones para contener el coronavirus.
Los líderes de la operación de deuda peruana fueron BBVA, Citigroup, Itaú, Goldman Sachs y Morgan Stanley.
(Reporte de Marco Aquino, con la colaboración de María Cervantes. Editado por Javier López de Lérida y Manuel Farías)