Buenos Aires, 16 nov (EFE).- La misión enviada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) a Argentina continúa trabajando "estrechamente" con las autoridades del país suramericano, después de que este domingo un miembro de dicha misión diera positivo por covid-19, informaron este lunes a Efe fuentes del organismo.
"Seguimos coordinando estrechamente con las autoridades argentinas y siguiendo todos los protocolos de salud y seguridad aplicables", aseveró un portavoz del organismo multilateral.
Las mismas fuentes señalaron que los miembros del FMI que están actualmente en Buenos Aires "continúan siguiendo el protocolo de aislamiento, no muestran síntomas y se sienten bien".
En ese sentido, todas las reuniones con las autoridades argentinas se están realizando de forma virtual, aunque desde el FMI prefieren "no especular" con la fecha de retorno a Estados Unidos.
"Continuaremos coordinando con las autoridades sobre los protocolos para el regreso a Washington", zanjó el portavoz.
El miembro del FMI que dio positivo, cuyo nombre no trascendió de forma oficial, se encontraba asintomático cuando recibió este domingo el resultado del hisopado.
Entre las personas que mantuvieron encuentros con el equipo del FMI en el que estaba la persona contagiada están el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, entre otros.
Guzmán publicó en su cuenta de Twitter que a raíz del caso positivo en la misión del FMI se realizó una prueba PCR y que su resultado fue negativo, y añadió que a pesar de ello se encuentra aislado y "la agenda de trabajo será virtual".
El equipo del organismo financiero internacional que llegó el pasado martes tenía previsto quedarse poco menos de dos semanas en Buenos Aires para iniciar las negociaciones formales con las autoridades.
La incertidumbre a la que está sujeta la economía argentina, pese a haber reestructurado su deuda soberana con éxito este año, pone en un lugar clave el acuerdo con el FMI.
Además de cursar su tercer año de recesión, Argentina mantiene una inflación persistente, producto de un déficit fiscal sin financiamiento genuino que se traduce en caída de reservas, presiones cambiarias y pobreza.