Vila-real (Castellón), 26 oct (EFE).- El Villarreal, que empató ante el Cádiz a cero en el estadio Carranza en Liga, volvió a dejar su casillero anotador a cero por tercera salida consecutiva, lo que supone el peor arranque goleador a domicilio de su historia y ha impedido en dos jornadas al equipo castellonense poder situarse como líder de la clasificación.
El gol conseguido por Vicente Iborra en Valdebebas ante el Real Madrid (2-1), en el pasado mes de julio, es la última diana que ha conseguido el equipo castellonense como visitante en LaLiga, ya que ni ante el Barcelona (4-0), Atlético (0-0) y Cádiz (0-0) – esta temporada - ha podido batir la meta contraria.
De esta manera ha firmado su peor inicio anotador en sus 21 temporadas en Primera división y es que hasta el momento el registro más negativo era el cosechado en la campaña 2011-2012 cuando tan solo anotó un tanto en sus tres primeras salidas.
Entonces, el equipo dirigido por Juan Carlos Garrido también fue goleado por el Barcelona (5-0) en su estreno y más tarde cayó ante el Granada (1-0) y empató contra el Athletic en San Mamés (1-1). Aquel deficiente inicio de temporada, 2011-2012, en el que solo anotó un gol en sus seis primeras salidas, fue el preludio de lo que más tarde se convertiría en el último descenso de categoría del club
Sin embargo, en esta ocasión, la falta de gol como visitante ha privado al equipo de mantener el coliderato con la Real Sociedad en esta jornada pasada y en la quinta jornada del campeonato, ya que de haber ganado en el Wanda o en Cádiz, el equipo de Unai Emery hubiera alcanzado o mantenido esa primera plaza.
Si a domicilio el equipo castellonense ha mostrado sus deficiencias, como local muestra una estadística opuesta al sumar diez de los doce puntos disputados, y marcar ocho goles, lo que supone el segundo mejor arranque goleador de su historia. EFE
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