Rusia denunció el jueves las acusaciones "infundadas" de los servicios de inteligencia de Estados Unidos que acusaron a este país y a Irán de haber obtenido información del registro de votantes y actuado para influir en la opinión pública antes de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.
"Las acusaciones llegan todos los días y son totalmente infundadas, no tienen ningún fundamento", dijo a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
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