LA PAZ, Bolivia (AP) — El exmandatario Carlos Mesa anticipó el miércoles que de ganar las elecciones del 18 de octubre conformará una coalición de gobierno para obtener mayoría parlamentaria, al tiempo en que buscaría un acuerdo nacional con el expresidente Evo Morales para afrontar los desafíos que enfrenta Bolivia.
“La existencia de una coalición desde el punto de vista de aliarse para construir una mayoría parlamentaria... no quita la necesidad de un acuerdo nacional que debe incorporar a todas las fuerzas políticas sociales y económicas”, incluyendo al Movimiento al Socialismo (MAS), la fuerza política de Morales, destacó Mesa en un encuentro con la prensa internacional.
Puesto que las encuestas anticipan unas elecciones muy divididas, en que no asoma un claro ganador en primera vuelta, al próximo gobierno le tocaría lidiar probablemente con una Asamblea Legislativa dividida.
En caso de que no hubiera un ganador en los comicios de octubre, se realizaría un balotaje el 29 de noviembre.
“No es viable un gobierno que empiece su gestión sin mayoría parlamentaria”, consideró Mesa, quien gobernó entre 2003 y 2005 y busca nuevamente la presidencia con el partido Comunidad Ciudadana (CC), de centro derecha.
Poco después, Mesa instó a la comunidad internacional a estar pendientes del proceso electoral y respaldar “el esfuerzo de Bolivia para volver a la normalidad política”, mediante un gobierno elegido en las urnas.
Los sondeos colocan en primer lugar de las preferencias al exministro de Economía, Luis Arce, candidato del MAS, seguido por Mesa, aunque pronostican que ninguno de los dos lograría los votos suficientes para evitar un balotaje. Hay, además, un 30% de indecisos, según las encuestas.
El país andino busca en las cruciales elecciones, pospuestas tres veces por la pandemia, zanjar una crisis política y social que dejó las anuladas elecciones del pasado año tras denuncias de fraude y la posterior renuncia de Morales, que generaron un convulsión en las calles con 36 muertos.
“Hay que construir un escenario de diálogo con todas las fuerzas políticas, pero entendiendo la existencia de un gobierno y oposición”, manifestó Mesa, de 67 años.
Mesa subrayó que el país necesita un acuerdo nacional para encarar los desafíos de la crisis sanitaria y socioecómica generada por la pandemia.
"Creo que es hora de cambiar el chip, el país necesita un diálogo entre todas las fuerzas y es una buena señal escuchar que se abra un diálogo con todas las fuerzas políticas”, planteó Jorge Dulón, analista político y profesor de la privada Universidad Católica boliviana.
Mesa también dijo que de ganar los comicios buscará una independencia de poderes para garantizar que se haga una investigación transparente respecto a las más de seis denuncias penales que pesan sobre el expresidente Morales.
En tanto, el Procurador del Estado, Alberto Morales, acusó a Arce de un desvío de fondos a cuentas personales y “depósitos sospechosos” en cuentas de su esposa por un equivalente a 860.000 dólares mientras fue ministro de Economía (2006-2019) de Evo Morales.
Esos movimientos financieros “irregulares”, fueron detectados por la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF), dependencia del gobierno, dijo el procurador en rueda de prensa el miércoles.
Arce no respondió a la acusación de inmediato. Sus partidarios han acusado de guerra sucia. El político también es investigado por la “compra irregular” de software para la Gestora de jubilaciones.
El gobierno y el MAS han cruzado acusaciones durante la campaña para los comicios.