BRUSELAS, 29 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Asamblea y presidente encargado, Juan Guaidó, fue el primer dirigente con el que se reunió la misión diplomática desplegada por la UE en Venezuela, que asegura haber constatado el apoyo "de todas las partes" en Caracas para avanzar en el diálogo que mejore las condiciones democráticas de cara a las elecciones legislativas.
Fuentes europeas han confirmado a Europa Press que Guaidó fue el primer dirigente venezolano con el que se vieron los diplomáticos españoles y altos cargos del Servicio Europeo de Acción Exterior, Enrique Mora y Javier Niño Pérez, enviados por el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, con el objetivo de promover el diálogo en Venezuela.
Los encuentros con la oposición y grupos de la sociedad civil coparon gran parte de la agenda de la UE en el país sudamericano. Más del 70 por ciento de las reuniones fueron con estos actores, han señalado las fuentes, en encuentros en los que se trató el deterioro de los Derechos Humanos en el país.
La misión, que se prolongó hasta el lunes, ha confirmado el "apoyo amplio de todas las partes" en Caracas al trabajo de la UE para acercar posturas en Venezuela. La diplomacia europea defiende que el diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición es la única salida a la crisis y, en este marco, el aplazamiento electoral surgió como una de las cuestiones que podrían mejorar las condiciones democráticas, puesto que facilitaría que la UE envíe observadores internacionales.
De todas formas, en Bruselas insisten en que la crisis en Venezuela va más allá del ciclo electoral y no se resolverá con un golpe de mano. "Se necesitan conversaciones a largo plazo entre todos los actores de Venezuela para encontrar una salida democrática y sostenible que dé respuesta las necesidades de la población", han subrayado las fuentes.
Borrell ha insistido en que solo una solución pacífica permitirá a los venezolanos superar su crisis y por ello la diplomacia debe promover los contactos con Maduro, incluso aunque la UE no le reconozca como legítimo presidente del país.
Ante las críticas del Partido Popular Europeo, Borrell aseguró que la misión diplomática desplegada no iba a Venezuela "a negociar, ni mucho menos mediar". De esta manera rechazó que el viaje fuera "secreto", como denunció el presidente del Grupo Popular, Manfred Weber, e insistió en que servirá para "dejar claro lo que la UE puede y no puede hacer para mejorar las condiciones electorales".