MEMPHIS, Tennessee, EE.UU. (AP) — Una jueza ordenó el miércoles aplicarle pruebas de ADN a un cuchillo y otras pruebas en el caso de un hombre negro preso en Tennessee que fue condenado a muerte en diciembre por el asesinato a puñaladas de una mujer y su hija hace 33 años.
La jueza del condado de Shelby, Paula Skahan, falló a favor de los abogados de Pervis Payne, quien en julio solicitó las pruebas de ADN. La jueza decidió que la evidencia sea enviada a un laboratorio de California contratado por los abogados defensores a fin de realizar pruebas aceleradas sin costo para el estado.
Payne, de 53 años, está programado para ser ejecutado el 3 de diciembre en Nashville. Los abogados de Payne esperan que pueda ser exonerado si no se encuentra su ADN en el cuchillo y otros artículos, o si se descubre el ADN de otro hombre en la evidencia.
Payne siempre ha mantenido su inocencia en las muertes a puñaladas de Charisse Christopher y su hija de 2 años, Lacie Jo, ocurridas en 1987. El hijo de Christopher, Nicholas, que tenía 3 años en ese momento, también fue apuñalado, pero sobrevivió.
Payne le dijo a la policía que estaba en el edificio de apartamentos de Christopher para reunirse con su novia cuando vio a un hombre con ropa ensangrentada pasar corriendo junto a él. Payne, que es de raza negra, ha dicho que encontró a las víctimas, que eran blancas, y que trató de ayudarlas, pero que luego entró en pánico cuando vio a un policía blanco, por lo que trató de escapar.