PARÍS (AP) — El presidente francés Emmanuel Macron criticó el viernes lo que llamó “separatismo islámico” en su país y a quienes buscan la ciudadanía francesa sin aceptar el “derecho de Francia a cometer blasfemia”.
Macron defendió al periódico satírico Charlie Hebdo, que publicó caricaturas del profeta Mahoma que sirvieron de pretexto a dos extremistas islámicos nacidos en Francia para lanzar un ataque letal en enero de 2015 contra la sala de redacción del periódico.
El semanario volvió a publicar las imágenes esta semana cuando comenzó el juicio de 14 personas por los ataques a Charlie Hebdo y a un supermercado kosher.
Hablando durante una ceremonia el viernes que celebró la historia democrática de Francia y la naturalización de los nuevos ciudadanos, el presidente francés dijo: “No se elige una parte de Francia. Se elige a Francia... La República nunca permitirá ninguna aventura separatista”.
La libertad en Francia, agregó Macron, incluye “la libertad de creer o no creer, pero esto es inseparable de la libertad de expresión, hasta el derecho a la blasfemia”.
Al señalar el juicio que comenzó el miércoles, declaró: “Ser francés es defender el derecho a hacer reír, a criticar, a burlarse, a caricaturizar”.
Los ataques de 2015 mataron a 17 personas y marcaron el comienzo de una ola de violencia por parte del grupo Estado Islámico en Europa.
El gobierno centrista de Macron ha prometido una ley en los próximos meses contra el “separatismo islámico”, pero aún no está claro exactamente qué es lo que controlará. Algunos críticos temen que pueda estigmatizar injustamente a la población musulmana de Francia, en gran parte moderada y la más grande de Europa occidental.