Malasia retiró los cargos contra el gigante financiero estadounidense Goldman Sachs por su papel en el escándalo de corrupción conocido como 1MDB, indicó un abogado del banco este viernes.
Miles de millones de dólares fueron desviados del fondo soberano 1Malaysia Development Berhad (1MDB), destinado al desarrollo económico de Malasia, en un fraude que contribuyó a la caída del ex primer ministro Najib Razak en 2018.
El dinero se utilizó para todo tipo de compras, desde obras de arte a bienes inmobiliarios o un yate de lujo.
Goldman Sachs fue acusado por Malasia de haber ayudado en el desvío de dinero organizando emisiones de bonos por un total de 6.500 millones de dólares, por las que el banco de inversiones habría cobrado una comisión de 600 millones de dólares.
Sin embargo, la agencia estatal de noticias Bernama informó que los fiscales comunicaron al tribunal de Kuala Lumpur que no pensaban seguir investigando al gigante de Wall Street.
Hisyam Teh, un abogado del banco, confirmó a la AFP que se habían retirado los cargos contra su cliente.
El mes pasado, Goldman Sachs pagó a Malasia 2.500 millones de dólares en el marco de un acuerdo amistoso para poner fin al escándalo, y la garantía de que al menos 1.400 millones de los fondos desviados de la 1MDB serán recuperados.
El primer ministro, Muhyiddin Yassin, afirmó que Malasia recibiría un total de 4.500 millones de dólares, que se sumarían a los fondos vinculados con el fondo 1MDB ya devueltos por Estados Unidos.
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