BERLÍN (AP) — Uno de los mayores burdeles de Europa se declaró en bancarrota tras meses sin poder abrir debido a las restricciones contra el coronavirus.
El burdel Pascha de Colonia consumió todas sus reservas financieras pagando por el mantenimiento de su edificio de 10 plantas y sus 60 empleados, según publico el jueves el diario alemán Express.
Dentro de una amplia batería de medidas para combatir la expansión del COVID-19, el estado alemán de Renania del Norte-Westfalia, donde se encuentra Colonia, prohibió el ejercicio de la prostitución hace cinco meses.
Organizaciones que representan a las trabajadoras sexuales habían advertido de que el cierre de los prostíbulos probablemente aumentaría la prostitución clandestina, en la que el riesgo de explotación es mayor.