Tras enorme mitin, llaman a afroestadounidenses a votar

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WASHINGTON (AP) — Los temas raciales en Estados Unidos están en el centro del debate nacional durante una pandemia que ha afectado desproporcionadamente más a los estadounidenses de raza negra. Los organizadores y participantes de la Marcha en Washington del viernes dicen que el evento ofreció un muy necesitado grito de guerra para la movilización.

Por el rostro de Brooke Moreland rodaban algunas lágrimas mientras observaba a decenas de miles de personas reunirse frente al monumento a Lincoln para denunciar el racismo sistemático que vive el país y exigir justicia racial después de varias muertes de estadounidenses de raza negra a manos de policías.

Sin embargo, para la madre de tres hijos de Indianápolis, los enardecidos discursos del viernes, en recuerdo de la Marcha a Washington de 1963 para exigir empleos y libertad, también abrieron paso a un mensaje central: vota y exige el cambio en las próximas elecciones de noviembre.

“Como personas negras, muchas personas que se ven como nosotros murieron para que nosotros fuéramos capaces de sentarnos en público, votar, ir a la escuela y poder caminar libremente y vivir nuestras vidas”, dijo Moreland, de 31 años. “Si cada elección es una oportunidad, entonces ¿cómo nos atrevemos a no votar después de que nuestros antepasados lucharon para que estemos aquí?”.

Esa determinación podría ser crítica en la elección presidencial cuando la contienda surge como un punto de tensión. El presidente Donald Trump, en la Convención Nacional Republicana de esta semana, enfatizó un mensaje de “ley y orden” para su base de seguidores, mayoritariamente blanca. Su rival demócrata, Joe Biden, ha expresado empatía hacia las víctimas de la brutalidad policial de raza negra y está contando con una fuerte participación de los afroestadounidenses para ganar en estados críticos como Carolina del Norte, Florida, Pensilvania y Michigan.

Al iniciar la fase final de la campaña, hay un intento cada vez más enérgico entre los estadounidenses de raza negra de transformar en poder político la actual frustración ante la brutalidad policial, el racismo sistemático y los estragos desproporcionados del coronavirus.

“Si no votamos en cantidades que nunca antes hayamos visto y permitimos que este gobierno siga haciendo lo que hace, nos dirigiremos a un camino de destrucción grave”, dijo Martin Luther King III a The Associated Press antes de hablar ante la multitud.

“Haré todo lo que pueda para motivar, promover y movilizar. Lo que está en riesgo es el futuro de nuestra nación, nuestro planeta. Lo que está en riesgo es el futuro de nuestros hijos”, afirmó después durante su discurso, pronunciado 57 años después del famoso “Yo tengo un sueño” de su padre.

Mientras los oradores imploraban a los asistentes a “votar como si nuestra vida dependiera de ello”, la marcha sucedió después de que otro policía blanco baleara a un hombre de raza negra —Jacob Blake, de 29 años, en Kenosha, Wisconsin, el domingo pasado—, hecho que desató manifestaciones y violencia que dejaron a dos personas muertas.

“Necesitamos una conversación nueva… actúan como si no fuera problema dispararnos por la espalda”, dijo el reverendo Al Sharpton. “Nuestro voto está empapado en sangre. Votaremos por una nación que detenga los George Floyd, que detenga los Breonna Taylor”.

El veterano de la Marina de Guerra Alonzo Jones-Goss, quien viajó a Washington desde Boston, dijo que planea votar por Biden porque, hasta ahora, el país ha pasado por demasiados eventos trágicos que han cobrado las vidas de estadounidenses de raza negra y otras minorías.

“Han pasado 57 años desde que el doctor King se paró ahí y pronunció su discurso, pero lo que es desafortunado es que lo que pasaba hace 57 años, todavía pasa hoy en día”, dijo Jones-Goss, de 28 años.

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