WASHINGTON (AP) — Funcionarios federales de Estados Unidos aseguran que no cuentan con información de inteligencia que indique que países extranjeros intenten perjudicar las votaciones por correo, ni tampoco indicios de alguna labor coordinada para cometer fraude a gran escala mediante el proceso de votación a través del servicio postal, a pesar de las múltiples acusaciones que ha hecho el presidente Donald Trump en los últimos meses.
Los funcionarios de distintas agencias federales no llegaron a contradecir directamente a Trump, pero sus comentarios dejan en claro que no han visto evidencia que respalde los señalamientos del presidente de un desenfrenado fraude electoral en las próximas elecciones, o de que el esperado aumento en las votaciones por correo debido a la pandemia de coronavirus deje a los comicios presidenciales de noviembre próximo en una posición particularmente vulnerable a la interferencia extranjera.
Por ejemplo, Trump tuiteó el 30 de julio que las votaciones por correo estaban siendo un “desastre catastrófico”, y añadió que “los demócratas hablan de influencia extranjera en las votaciones, pero saben que las votaciones por correo son una forma sencilla en que los países extranjeros entren a la contienda”.
Pero un alto funcionario de la Dirección de Inteligencia Nacional que fue cuestionado durante una conferencia telefónica el miércoles sobre la amenaza de que países extranjeros fabriquen sus propias boletas o amplifiquen la desinformación sobre la integridad del proceso electoral por correo, dijo que no había ni información ni inteligencia de que algún adversario estuviera “involucrado en ningún tipo de actividad para socavar alguna parte de las votaciones por correo”.
Un alto funcionario del FBI señaló que hasta el momento las autoridades no han visto ningún esfuerzo coordinado a nivel nacional por corromper las votaciones por correo. El funcionario también dijo que, considerando lo difuso y variado de los sistemas electorales en todo el país, sería “sumamente complicado” alterar los resultados de manera cuantificable. Sin embargo, el funcionario dijo que el FBI sigue comprometido a investigar cualquier fraude que surja.
Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato debido a que no estaban autorizados a tocar el tema de manera pública.
Tres de las principales agencias responsables de combatir las amenazas al sistema electoral del país organizaron el informe en un momento crucial para el proceso electoral, a poco más de dos meses de que se lleven a cabo los comicios y a unas semanas de que comience el proceso de votación por correo. Trump ha realizado acusaciones sin fundamento de que la elección estará marcada por el fraude y se rehúsa a comprometerse a aceptar los resultados. Los demócratas afirman que las agencias no han sido honestas con el público sobre las posibles amenazas, y el riesgo de interferencia extranjera fue subrayado en un reciente reporte del Senado que proporcionó nuevos detalles sobre la injerencia de Rusia en 2016.