Miami, 17 ago (EFE).- Las autoridades medioambientales de Florida (EEUU) determinaron que la muerte masiva de peces en la Bahía Vizcaína (Biscayne Bay) de Miami es el resultado de un bajo nivel de oxígeno disuelto en el agua, mientras una ONG pidió retirar la materia orgánica descompuesta para evitar una mayor contaminación.
"Las condiciones de bajo oxígeno disuelto pueden ser causadas por una serie de factores (...) como las altas temperaturas estacionales del agua", concluyó el informe de la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC, por sus siglas en inglés), citado este lunes por el canal 4 local de CBS.
También, los científicos de FWC relacionan entre los factores "la escorrentía y la renovación de las aguas del fondo pobres en oxígeno después de lluvias recientes y fuertes", comunes de los meses de verano.
La agencia estatal indicó que se han observado grandes esteras de algas que pueden consumir oxígeno a medida que se descomponen.
"Lo más probable es que se trate de esteras de la macroalga Sargassum, que se transportan a la costa este de Florida normalmente durante los meses de verano ", según la FWC.
"Esta es una emergencia. Es la naturaleza que nos dice ahora mismo que debemos actuar de inmediato ", dijo a CBS Ken Russell, comisionado del distrito 2 de Miami.
Por su parte, la organización ambientalista Miami Waterkeeper aseguró que han "mejorado" los niveles de oxígeno en las zonas donde desde la semana pasada aparecen peces muertos a diario, y exhortó a la población a retirar la materia orgánica descompuesta para evitar una mayor contaminación.
"Buenas noticias: parece que las condiciones en la Bahía de Biscayne están mejorando un poco, aunque todavía estamos observando la situación con atención...", escribió en redes sociales en las últimas horas Rachel Silverstein, directora ejecutiva de Miami Waterkeeper.
Silverstein se refirió a una iniciativa de la Alcaldía de Miami que, en coordinación con los bomberos de la ciudad, desplegó barcos especiales para bombear el agua en las zonas afectadas de la bahía con la idea de aumentar los niveles de oxigenación.
Estos niveles, medidos conjuntamente entre la ONG y un equipo de investigadores del Instituto del Medio Ambiente de la Universidad Internacional de Florida (FIU), estaban el pasado viernes al 15 %.
Una vez completada la misión de bombeo, los niveles se habían recuperado al 30 %, indicó la televisión Local 10 citando un informe de la FIU.
Miami Waterkeeper, que durante los últimos días envió a FWC muestras de peces muertos y agua de la bahía, ha venido alertando sobre el deterioro de los pastos marinos en la zona.
Según afirma, el fondo marino se ha estado convirtiendo en un sistema dominado por las algas durante la mayor parte de una década.
"Los contaminantes de especial preocupación incluyen fertilizantes, efluentes sépticos, derrames de aguas residuales, desechos de mascotas y otras fuentes de nutrientes", anotó la ONG en un comunicado.
Entre las medidas coordinadas con el ayuntamiento de Miami, está la colocación de contenedores de compostaje a lo largo de la costa occidental de la bahía, la más afectada por la mortandad de peces.
Tanto las autoridades como los ecologista alientan a los residentes a deshacerse de los peces muertos que encuentren a lo largo de la costa, ya que esta materia en descomposición se convierte en un caldo de cultivo para las bacterias que absorben una gran cantidad de oxígeno de la bahía, actualmente en niveles muy bajos, según los científicos.