LISBOA (AP) — En una noche de fallas frustrantes, Neymar encontró finalmente la manera de auxiliar al París Saint-Germain.
El jugador más caro del mundo ayudó en la gestación de dos goles postreros y el PSG montó una reacción heroica en los descuentos para superar el miércoles 2-1 al Atalanta, con lo cual avanzó a las semifinales de la Liga de Campeones, una instancia en que no se colocaba desde hacía 25 años.
Fue un alivio para el brasileño, frecuentemente criticado por no haber guiado al adinerado club francés a la conquista del trofeo más codiciado en Europa. En contraste, el final del duelo constituyó un martirio para un Atalanta que se quedó muy cerca de mantener vivo su sueño en la Champions, un certamen que disputó por primera ocasión.
El club italiano, de modesto presupuesto, se puso en ventaja por medio de un tiro combado de Mario Pasalic a los 27 minutos.
Sin embargo, Neymar abasteció a Marquinhos para que igualara el marcador a los 90, y se involucró en la jugada que derivó en el tanto de Eric Choupo Moting, al tercer minuto de la reposición.
Ese tanto implicó que el PSG volviera a la ronda de los cuatro mejores en el máximo torneo de clubes europeos tras una ausencia de un cuarto de siglo.
“Jamás pensé que volveríamos a casa mañana”, dijo Neymar. “En cada momento, simplemente buscamos una cosa: Avanzar a la semifinal”.
Los suplentes ayudaron a darle un nuevo destino al PSG. Kylian Mbappé ingresó cuando restaban 30 minutos del cotejo, mientras que Choupo-Moting hizo lo propio a 10 de la conclusión.
“Cuando entré, pensé que no podíamos perder”, dijo Choupo-Moting, cuyo pase alto en diagonal llegó a Neymar en la banda izquierda a los 90 minutos. El disparo defectuoso del astro brasileño se desvió en un defensa y le quedó como regalo a su compatriota Marquinhos.
El Atalanta quedó conmocionado. El PSG recuperó la energía.
Y en otra escapada de Neymar, los jugadores del conjunto italiano lucieron cansados. Mbappé recibió el balón y sirvió para que Choupo-Moting se deslizara y lo enviara a las redes.
Fue un doloroso colapso del Atalanta, que alcanzó alturas inesperadas en su primera experiencia dentro de este torneo, durante un año en que su ciudad, Bérgamo, figuró entre las más golpeadas por el coronavirus en Europa.
No hubo público en el estadio, lo que no impidió que muchos seguidores del Atalanta volaran desde el norte de Italia hacia la capital portuguesa, tan sólo para ovacionar al equipo cuando pasó frente a ellos en un autobús.
Tendrán una nueva oportunidad en la próxima edición del torneo. Atalanta quedó en el tercer puesto de la Serie A por segundo año consecutivo, por lo que volverá a la Liga de Campeones.
“En este momento, es bastante doloroso”, dijo el volante del Atalanta, Marten de Roon. “Mañana estaremos orgullosos de nuestro equipo, pero por el momento sólo siento decepción”.
La pandemia impidió que los cuartos de final se disputaran a ida y vuelta, como es habitual. Se optó en cambio por un solo partido en la cancha neutral de Lisboa.
Así que no hay segundas oportunidades.
“Fue un partido loco, difícil y con un rival fuerte”, valoró Choupo-Moting. “Pienso que mostramos hasta el último momento que creemos en nosotros mismos. No fue fácil, porque tuvimos algunas ocasiones y desafortunadamente no pudimos anotar”.
El internacional camerunés ingresó como reemplazo del argentino Mauro Icardi, quien en una noche de extravío hizo apenas un disparo, desviado. Al menos, Neymar tiró con más frecuencia al arco, si bien erró varias buenas oportunidades en el primer tiempo, incluida una pifia garrafal en el tercer minuto, solo frente al portero Marco Sportiello.
Su tiro se fue muy desviado.
Luego, al PSG lo salvó una atajada de Keylor Navas, a un cabezazo de Hans Hateboer. Pero el arquero tico fue vencido a los 26 minutos.
Un pase del colombiano Duván Zapata le llegó a Pasalic, quien disparó combado hacia la parte alta de las redes para su duodécimo tanto de la temporada.
Neymar erró otros disparos, y lució precisamente como un jugador que ha disputado sólo dos partidos competitivos desde marzo, debido a que la pandemia obligó a dar por concluida la campaña en Francia.
Mbappé ingresó sólo para la última media hora, recién recuperado de una lesión de tobillo.
Pero ambos jugadores causaron impacto al final, generando las jugadas que pusieron al PSG en camino a lo que sería su primera copa de Europa, en una campaña en la que conquistó ya trofeos nacionales, incluido el de la liga, que se le entregó sobre la mesa ante la cancelación por la pandemia.
“Hemos ganado ya cuatro títulos en esta temporada, pero el más importante es éste”, dijo Choupo-Moting. “Creemos realmente en nosotros, hoy lo hicimos. Todos saben que tenemos a jugadores con gran calidad individual, pero queríamos demostrar que somos también un equipo. Hoy dimos un gran paso ante un oponente muy bueno. Mis respetos al Atalanta, pero estamos contentos por lo que hicimos”.