QUITO (AP) — El presidente ecuatoriano Lenín Moreno dijo el martes que declaró estado de excepción en el sistema penitenciario del país poco después de que se informara de un nuevo enfrentamiento entre integrantes de bandas de mafiosos que han dejado varios muertos.
En su cuenta de Twitter, el mandatario escribió que tomó la decisión para controlar a “las mafias que están creando caos en los centros penitenciarios”.
La medida permite que la policía y las fuerzas armadas se sumen al control de las 48 cárceles estatales donde están hacinados cerca de 40.000 presos. Una acción similar adoptó el régimen en mayo del año pasado por circunstancias parecidas.
Durante esta tarde se conoció de una pelea entre presos de la cárcel de Cotopaxi, que dejó dos fallecidos, mientras que el sábado en la Penitenciaría del Litoral mataron a un israelí vinculado a un caso de corrupción. A inicios de agosto, en esa misma prisión, se produjo un enfrentamiento entre la banda de los Lagartos y la de los Choneros que dejó 11 presos asesinados.
Entre otros delitos, desde Ecuador grupos de narcotraficantes locales en complicidad con bandas internacionales, exportan droga proveniente de Colombia y Perú, especialmente a Estados Unidos y Europa.