Ministro de Brasil se compromete con austeridad tras pandemia

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(Bloomberg) -- Brasil realizará la inversión pública necesaria en el mundo pospandémico sin poner en peligro el compromiso del Gobierno con la disciplina fiscal, según el ministro de Infraestructura del país.

Tarcísio Gomes de Freitas, una de las voces más influyentes en el gabinete del presidente, Jair Bolsonaro, buscó disipar la preocupación del mercado sobre el futuro de una ley clave de límite de gasto fiscal en medio de las persistentes presiones presupuestarias a raíz del coronavirus. La regla, aprobada en 2016 y considerada por los inversionustas como la última línea de defensa de Brasil contra los déficits presupuestarios desbocados, congela el gasto público durante dos décadas, lo que reduce el margen de inversión a medida que los gastos obligatorios siguen creciendo.

“El Gobierno está comprometido con el límite, con la línea de trabajo determinada por Guedes y su equipo”, dijo Gomes de Freitas de en una entrevista, en una muestra de apoyo a los planes de austeridad fiscal del ministro de Economía, Paulo Guedes.

Brasil, uno de los epicentros mundiales del coronavirus, ya ha gastado más de 500.000 millones de reales (US$92.000) para compensar los impactos de la pandemia. El gasto adicional hará que su deuda se eleve a 98% del PIB para fines de año, según el Ministerio de Economía. Guedes ha prometido reducir drásticamente el gasto el próximo año para volver a encarrilar las finanzas del país. Pero la presión por más dinero sigue proviniendo de los legisladores que apoyan a Bolsonaro en el Congreso, así como de algunos miembros del gabinete que quieren expandir la inversión pública para aliviar el golpe económico de la enfermedad.

En una entrevista con el diario O Globo el viernes, el ministro de Desarrollo Regional, Rogerio Marinho, dijo que no está de acuerdo con Guedes y pidió más inversión pública en infraestructura este año.

Gomes de Freitas, en cambio, dijo que los inversionistas privados llevarán a cabo la mayoría de los planes de infraestructura del país, y el Gobierno intervendrá solo en áreas que requieren algún apoyo para volverse atractivas, como las carreteras en los estados norteños de Para y Maranhao.

No será una tarea fácil. El ministro, ingeniero y miembro del ejército, estima que el Gobierno necesita invertir al menos 9.000 millones de reales en infraestructura el próximo año. Debido al límite de gasto, su ministerio solo tiene 6.300 millones de reales disponibles. La solución, dice, es convencer a los legisladores de que apoyen algunos de esos planes con fondos destinados a sus propios proyectos.

Nota Original:Brazil Infrastructure Boss Commits to Austerity in Post-Pandemic

©2020 Bloomberg L.P.

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