Por Susan Heavey y David Morgan
WASHINGTON, 28 jul (Reuters) - Florida reportó el martes un aumento récord para un día en las muertes por coronavirus, mientras que los casos en Texas superaron la marca de los 400.000, avivando los temores de que Estados Unidos está perdiendo el control de la enfermedad y presionando al Congreso para que apruebe otro paquete de ayuda.
El alza en las infecciones en Florida, Texas, Arizona y California durante este mes ha puesto a prueba al sistema hospitalario y forzado a dar un giro en 180 grados en las medidas para reactivar las economías tomadas en marzo y abril para frenar la propagación del virus.
Florida, el tercer estado más poblado de Estados Unidos y un destino muy apreciado para los amantes de la playa y los jubilados, tuvo 191 muertes por coronavirus en las últimas 24 horas, su mayor aumento diario desde el comienzo de la epidemia, dijo el departamento de salud del estado.
Texas, el segundo estado más poblado, sumó más de 6.000 casos nuevos el lunes para totalizar 401.477, según un recuento de Reuters. Solo otros tres estados -California, Florida y Nueva York- tienen más de 400.000 casos.
Georgia, que limita con Florida, reportó 54 muertes más el martes y su número total de casos aumentó a más de 175.000, según su departamento de salud.
La pandemia, que surgió por primera vez en China a fines del año pasado, está llevando el número de muertos en Estados Unidos por COVID-19, la enfermedad respiratoria causada por el nuevo coronavirus, más cerca de la marca de 150.000 a poco más de tres meses de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.
El aumento de los casos en Florida llevó al presidente Donald Trump la semana pasada a cancelar la convención del Partido Republicano programada para su nominación, que iba a realizarse en Jacksonville a fines de agosto.
Sin embargo, hay un atisbo de esperanza en los datos de Texas, donde el departamento de salud estatal informó que las hospitalizaciones por COVID-19 cayeron el lunes.
El médico Anthony Fauci, uno de los principales expertos en enfermedades infecciosas del país, dijo que había señales de que el reciente aumento podría estar llegando a su pico en estados como Florida y Texas.
En Washington, en tanto, el Congreso está estancado en duras conversaciones sobre otro paquete de alivio por el coronavirus para ayudar a las familias y empresas estadounidenses a recuperarse de la crisis.
Los senadores republicanos anunciaron el lunes un paquete de ayuda por 1 billón de dólares elaborado junto a la Casa Blanca, que fue calificado como el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, como un plan "a medida y enfocado" para reabrir colegios y negocios, además de proteger a las compañías de posibles demandas.
No obstante, la propuesta provocó oposición inmediata desde las filas demócratas y republicanas. Los primeros se quejaron de que era demasiado limitada comparada con su iniciativa por 3 billones de dólares aprobada por la Cámara de Representantes en mayo. Algunos republicanos, por su parte, la calificaron como demasiado cara.
(Reporte de Susan Heavey, Daniel Trotta, Patricia Zengerle, Lisa Shumaker y Maria Caspani. Escrito por Paul Simao. Editado en español por Rodrigo Charme)