El remate del avión presidencial uruguayo culminó este miércoles sin oferentes y el gobierno volverá a tratar de venderlo en una nueva subasta, informó el ministro de Defensa, Javier García.
"Nadie ofertó por el avión presidencial a pesar de que la base era la tercera parte del valor que se pagó en su momento", señaló García en su cuenta de Twitter, minutos después de que terminara la fallida operación.
"Vamos a convocar a otro remate. Fue inútil y cara su compra, y más caro es mantenerlo", agregó.
El jet Hawker modelo HS 125-700A fabricado en 1979 fue adquirido en 2015, durante el gobierno del izquierdista Tabaré Vázquez, por 1.010.000 dólares.
La administración actual del centroderechista Luis Lacalle Pou considera que la nave se adquirió a un precio excesivo en su momento, que es innecesaria y que su mantenimiento demanda un gasto excesivo.
"Este avión salió caro y no cumplió su fin. Desde enero de 2018, solo en mantenimiento lleva gastados 1,6 millones de dólares", señaló García en mayo, cuando se anunció que el jet sería rematado.
La base de la subasta fue fijada en 350.000 dólares, pero a pesar de que llegaron varias consultas desde el exterior, nadie pagó la seña requerida en los días previos, y finalmente no se presentaron ofertas.
El avión con capacidad para ocho pasajeros fue presentado como nave "multipropósito", ya que puede efectuar vuelos sanitarios. No obstante, según García, de los 135 vuelos que realizó, solo 14 tuvieron ese fin.
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