DALLAS (AP) — Investigadores del Ejército identificaron los restos de una soldado que desapareció hace más de dos meses de una base en Texas, dijo el domingo una abogada de la familia de la víctima.
Los restos localizados la semana pasada enterrados cerca de Fort Hood pertenecen a la especialista Vanessa Guillén, y oficiales del Ejército notificaron a sus familiares en Houston, dijo la abogada Natalie Khawam a The Associated Press.
Guillén, quien estaba desaparecida desde abril, fue asesinada y desmembrada por otro soldado que se suicidó la semana pasada, según investigadores federales y militares.
Los restos humanos fueron localizados el martes cerca del río León, en el condado Bella, a unos 32 kilómetros (20 millas) al este de Fort Hood, mientras se buscaba a Guillén.
Horas antes el domingo, un portavoz del Ejército dijo que seguían a la espera de una identificación definitiva del cadáver.
Los investigadores no pudieron utilizar los registros dentales para identificar a Guillén debido al avanzado estado de descomposición de los restos, pero usaron ADN extraído de muestras óseas y de cabello, detalló Khawam. La familia de Guillén fue notificada mientras se encontraba acompañada de un sacerdote, agregó.
Oficiales del Ejército identificaron al soldado sospechoso de la desaparición de Guillén como Aaron David Robinson. Cecily Aguilar, una civil de 22 años residente de una comunidad aledaña a Fort Hood, fue arrestada y acusada con un cargo por supuestamente ayudar a esconder los restos de la soldado de 20 años, según una denuncia penal.
La familia de Guillén ha dicho que cree Robinson la acosaba sexualmente y exige una investigación del Congreso.
Mayra Guillén dijo la semana pasada que su hermana había hablado con su madre acerca de haber experimentado acoso sexual, pero que su madre ha estado demasiado acongojada como para hablar al respecto. A partir de sus mensajes de texto, Mayra Guillén cree que su hermana tenía miedo mientras estaba en Fort Hood.
Khawam dijo el domingo que el acoso sexual en las fuerzas armadas es “epidémico” y requiere que el Congreso le preste atención.
“Ya no pueden hacerse de la vista gorda", afirmó.