El Pentágono afirmó este miércoles que los talibanes mantienen un estrecho vínculo con el aliado de Al Qaida en Afganistán, que tiene un "permanente interés" en atacar tropas estadounidenses y extranjeras.
En un acuerdo que los talibanes firmaron con Estados Unidos en febrero, los insurgentes acordaron evitar que Al Qaida use Afganistán como refugio para planear ataques.
Pero en los meses posteriores, los talibanes han seguido trabajando con el asociado de Al Qaida en el Subcontinente Indio (AQIS), la organización que busca instaurar el Estado Islámico contra los gobiernos del subcontinente, dijo el Departamento de Defensa de Estados Unidos en un informe.
"AQIS apoya y trabaja habitualmente con miembros talibanes de bajo nivel en sus esfuerzos para socavar al gobierno afgano, y mantiene un interés permanente en atacar a las fuerzas estadounidenses y objetivos occidentales en la región", dijo el Pentágono en una evaluación de seguridad para el Congreso.
"A pesar del progreso reciente en el proceso de paz, EI (por el grupo Estado Islámico) mantuvo estrechos vínculos con los talibanes en Afganistán, probablemente para protección y capacitación", dice el informe.
El reporte del Pentágono se conoce tras la publicación de un análisis de la ONU el mes pasado que descubrió que Al Qaida y los talibanes "permanecen cerca" y tienen consultas regulares sobre las negociaciones con Estados Unidos.
Observadores afganos se han preguntado durante mucho tiempo si Washington está siendo ingenuo al pensar que los talibanes cumplirían una promesa de cortar vínculos con Al Qaida, el grupo yihadista detrás de los ataques del 11 de septiembre de 2001 que llevaron a la invasión estadounidense de Afganistán.
El informe agrega que todos los miembros "centrales" de Al Qaida que aún se encuentran en Afganistán se centran principalmente en la supervivencia y han delegado el liderazgo regional a AQIS.
"El interés de AQIS en atacar a las fuerzas estadounidenses y otros objetivos occidentales en Afganistán y la región persiste, pero la presión continua de la coalición (antiterrorista) ha reducido la capacidad de AQIS para realizar operaciones en Afganistán sin el apoyo de los talibanes", dijo el Pentágono.
El acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes firmado el 29 de febrero tenía por objetivo el inicio de conversaciones de paz a partir del 10 de marzo entre los insurgentes y el gobierno de Kabul. Pero esas conversaciones han sido difíciles de establecer en medio de intercambios de prisioneros y una creciente violencia.
Según el acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes, las fuerzas extranjeras deberían abandonar Afganistán el año próximo.
Sin embargo, el general Kenneth McKenzie, que encabeza el Comando Central de Estados Unidos, dijo el mes pasado que "tendrían que cumplirse las condiciones" que convenzan al país de que los ataques "no se generarán desde Afganistán".
bur-wat/sst/mls/dga