RÍO DE JANEIRO (AP) — El ministro de Educación brasileño —el economista Carlos Alberto Decotelli da Silva— presentó el martes su renuncia cinco días después de haber sido nombrado, creando un nuevo dolor de cabeza para el presidente Jair Bolsonaro.
Decotelli se vio presionado por cuestionamientos que lo señalaban por presuntamente haber falseado su currículum.
“Me invitaron para hacer un trabajo de gestión, integración y diálogo. Acepté la propuesta de Bolsonaro, comencé a diseñar un proyecto. Ese proyecto fue cuestionado por el hecho de mi inconsistencia curricular", dijo Decotelli a CNN Brasil la tarde del martes, confirmando su salida del gobierno.
La oficina de prensa del palacio presidencial del Planalto y del Ministerio de Educación no respondieron de momento los pedidos de confirmación de The Associated Press ni comunicaron si Bolsonaro aceptó la renuncia.
El jueves Bolsonaro anunció en las redes sociales que Decotelli asumiría en el Ministerio de Educación y destacó los diplomas presuntamente conseguidos por el profesor en universidades de Brasil y el exterior. No obstante, en los últimas días el ministro, que no había tenido ceremonia de asunción, acumuló cuestionamientos de tres altas casas de estudio por supuestas incongruencias en su curriculum.
El martes la Fundación Getulio Vargas (FGV) señaló que el ministro de Educación no fue investigador ni profesor allí, como figuraba en el curriculum compartido por el gobierno, y que sólo fue profesor colaborador en cursos de posgrado.
“El profesor actuó apenas en cursos de educación continuada, en los programas de formación de ejecutivos y no como profesor de cualquiera de las escuelas de la Fundación”, dijo la FGV en una nota. El Ministerio de Educación no respondió un pedido de comentarios enviado por AP.
Los cuestionamientos de las universidades sobre las credenciales del ministro y la abrupta salida de Decotelli han creado un nuevo trastorno a Bolsonaro justo cuando buscaba disminuir las tensiones con otros poderes y revertir el rechazo a su gobierno asociado con la gestión de la pandemia de COVID-19.
Bolsonaro asumió el poder en 2019 con la promesa de elegir ministros técnicos en vez de guiarse por nominaciones políticas. La oposición ha cuestionado al presidente por no cumplir esa promesa luego de tener un primer ministro despedido después de cuatro meses y un ministro de Educación que enfrentó críticas por centrarse más en librar una guerra cultural que en coordinar la política educativa brasileña. Decotelli se había convertido en el primer ministro negro del gobierno brasileño y su designación, en reemplazo del exministro Abraham Weintraub, apuntaba a calmar ánimos entre el Ejecutivo y el Supremo Tribunal brasileño. Pero ahora podría perder el cargo antes de haber comenzado a ejercerlo.
El 22 de abril en una reunión ministerial, el predecesor de Decotelli dijo que pondría presos a los miembros del Supremo tribunal, a quienes llamó “vagabundos”, y es blanco de una investigación por integrar presuntamente una red que publica falsedades y agravios contra los miembros de la Corte en las redes sociales.
El 17 de junio la Corte votó por mantener a Weintraub dentro de la investigación y tres días más tarde el exfuncionario viajó a Estados Unidos, donde asumirá una dirección del Banco Mundial. El despido fue publicado en el diario oficial cuando ya se encontraba fuera del país, lo que generó críticas por el uso de pasaporte diplomático. Partidos de oposición enviaron una carta el 22 de junio al embajador de Estados Unidos en Brasil, Todd Chapman, en la que expresaron su preocupación de que Weintraub hubiera huido para esquivar el proceso en curso.
La réplica de la FGV es el tercer señalamiento que recibe Decotelli, quien había incluido en su currículum un doctorado en la Universidad de Rosario, de Argentina, y un pos-doctorado en la Universidad de Wuppertal, de Alemania. El rector de la universidad argentina dijo en Twitter el 26 de junio que el ministro no concluyó el doctorado. La casa de estudios alemana, en tanto, señaló que el ministro no hizo un pos-doctorado en una nota enviada a la TV Globo.
Bolsonaro dijo la noche del lunes que “por inadecuaciones curriculares el profesor (Decotelli) viene enfrentando todas las formas de deslegitimación”. “Decotelli no pretende ser un problema para su ministerio, como también está consciente de su error”, dijo el presidente en Facebook.