Bubba Wallace condujo el auto 43 hasta la salida de pits, el campeón de NASCAR Kyle Busch empujaba el vehículo de un lado, y su amigo cercano, Ryan Blaney, del otro.
El resto de los 40 pilotos y miembros de los equipos le siguieron. Una vez que el auto se detuvo, Wallace salió del vehículo, se sentó al borde de la ventaja y rompió en llanto. Richard Petty, miembro del Salón de la Fama y dueño del equipo, le puso una mano en el hombro para consolarlo.
Mientras las autoridades federales llegaban el lunes a Talladega para iniciar una investigación tras el hallazgo de un nudo de horca en el garaje de Wallace, el único piloto de raza negra en la NASCAR, el resto del serial se manifestó en apoyo.
“La noticia nos ha perturbado a todos y desde luego queremos justicia y saber quién y por qué”, dijo el siete veces campeón Jimmy Johnson. “Y queremos estar con nuestro amigo”.
El fiscal federal Jay Town informó que su despacho, el FBI y la división de derechos civiles del Departamento de Justicia investigan la situación.
“Sin importar que se presenten cargos federales o no, este tipo de acto no tiene cabida en nuestra sociedad", dijo Town.
La serie de autos stock, fundada en el sur de Estados Unidos hace más de 70 años, ha tratado de distanciarse de la bandera por mucho tiempo, exponiéndose el riesgo de alienar a un sector importante de su afición.
A pedido de Wallace, la NASCAR prohibió la bandera en sus circuitos e instalaciones, cuando el país lidia con las protestas que se desataron en gran medida por el caso de George Floyd, el hombre negro que estaba esposado cuando murió bajo la custodia de la policía de Minneapolis.
Horas después que la carrera del domingo fuera pospuesta por lluvia, la NASCAR anunció el hallazgo de la soga y lanzó una investigación de inmediato. Añadió dijo que haría todo lo posible por encontrar a los responsables y “eliminarles del deporte”.
“Estamos enfadados e indignados, y no podemos decir con suficiente firmeza lo en serio que nos tomamos este acto infame”, indicó la serie en un comunicado. “Como hemos indicado sin ambigüedad, no hay espacio para el racismo en la NASCAR, y este hecho sólo refuerza nuestra resolución para hacer este deporte abierto y hospitalario para todos”.
Wallace es el único piloto negro a tiempo completo en la Cup Series, la máxima división de la NASCAR.
“El despreciable acto de racismo y odio me deja increíblemente entristecido y sirve como doloroso recordatorio de lo mucho que nos queda como sociedad y lo persistentes que debemos ser en la lucha contra el racismo”, escribió el piloto en Twitter.
“Como me dijo mi madre hoy, ‘Sólo intentan asustarte’”, añadió. “Esto no acabará conmigo, no cederé ni me rendiré. Seguiré defendiendo con orgullo aquello en lo que creo”.
La soga se encontró el mismo día que la nueva prohibición a la bandera afrontaba su mayor desafío. La norma entró en vigencia antes de la carrera de la semana pasada cerca de Miami, pero ese día sólo había unos 1.000 militares en las gradas.
En Talladega, en el corazón del sur de Estados Unidos, se permitió la entrada a hasta 5.000 aficionados, aunque la lluvia aplazó la carrera hasta el lunes. En un primer momento no había reportes sobre si se habían confiscado o retirado banderas en el circuito, pero la bandera estaba presente no muy lejos.
El sábado y el domingo hubo protestas informales en los que autos y camionetas pasaron por carreteras cercanas ondeando la bandera y pasando ante el circuito. Una avioneta sobrevoló la zona con una bandera con la bandera y las palabras “Retiren el financiamiento a la NASCAR".
Wallace, de 26 años y nacido en Alabama, pilota el número 43 para el equipo Richard Petty Motorsports. Dijo haber encontrado apoyo entre sus compañeros por su postura contra la bandera, algo que señaló en su tuit el domingo por la noche.
Brian France, expresidente de NASCAR, trató de vetar el uso de la bandera en los autódromos en 2015, una propuesta que no se hizo cumplir y pasó inadvertida.
Este año ha sido diferente, con Wallace tomando la iniciativa. Durante el último mes y el país conmocionado por las protestas relacionadas a la muerte de Floyd, Wallace lució una camiseta negra con las palabras “No Puedo Respirar” en una carrera y estampó la frase #BlackLivesMatter en otra.
Wallace, cuyo padre es blanco, no siempre expresó sus sentimientos sobre el racismo. Incluso después de la muerte de Floyd, no fue el primer piloto en pronunciarse a favor de la igualdad racial. Dijo que lo que le motivó a hablar sobre el racismo fue ver el video de Ahmaud Arbery, quien murió baleado en Georgia. Ahora reconoce que no debe desperdiciar su plataforma como un reconocido piloto de NASCAR.
La gobernadora de Alabama Kay Ivey dijo sentirse “en shock” por el “vil acto” contra Wallace.
“No hay espacio para esta muestra repugnante de odio en nuestro estado", dijo Ivey.
Richard Petty, siete veces campeón de la NASCAR, viajó a Talladega para apoyar a su piloto. Petty, quien cumplirá 83 años el mes entrante, no ha presenciado una carrera durante la pandemia de coronavirus y afirmó en un comunicado que “he quedado enfurecido por el acto de alguien que ha puesto un nudo de horca en el garaje de mi equipo”.
El astro de la NBA LeBron James tuiteó su apoyo a Wallace, tildando de “enfermizo” el nudo.
“¡Que sepas que no estas solo! Estoy contigo, así como todos lo demás deportistas", escribió James.