MADRID (AP) — Tres localidades del norte de España volvieron a imponer medidas de confinamiento social después de un repunte en las infecciones por coronavirus debido a un brote de contagios entre trabajadores que manejaban frutas y verduras en un almacén.
Las autoridades del gobierno de Aragón han ordenado límites a la actividad pública y recomendaron una menor movilidad en varias ciudades después de registrar 33 infecciones, la mayoría de ellas vinculadas al almacén donde unos 200 trabajadores están siendo sometidos a pruebas diagnósticas.
El principal funcionario de salud pública de la región dijo el lunes que las autoridades confían en que pueden controlar el brote en una etapa temprana. “Podemos tener transmisión comunitaria, por lo que es necesario adoptar medidas y contenerla”, dijo el director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Javier Falo, citado por la agencia Europapress.
Falo agregó que la mayoría de los infectados son jóvenes y que no tenían síntomas o bien mostraban formas muy leves de COVID-19.
El lunes fue el primer día hábil de España después de dejar atrás 98 días de encierro generalizado que terminó el fin de semana, con algunas restricciones restantes en el transporte público, la capacidad de lugares públicos y las reuniones masivas.
Desde principios de marzo, España ha registrado más de 246.000 infecciones y más de 28.300 muertos por el virus.
En la vecina Portugal, el gobierno está restableciendo las restricciones en algunas partes del área metropolitana de Lisboa a medida que las autoridades luchan por romper la cadena de transmisión del coronavirus en las poblaciones que rodean la capital.
El primer ministro, Antonio Costa, dijo el lunes que los puntos críticos de COVID-19 están en 15 municipios.
Dijo que, a partir de la medianoche, se reintroducirá un límite de 10 personas a las reuniones en esas áreas y que los establecimientos comerciales tendrán que cerrar a las 8 p.m. También habrá más policías para patrullar las calles.
Por su parte, Francia alertó de un aumento de los casos de COVID-19 en su territorio sudamericano, Guayana Francesa, que comparte frontera con Brasil, el segundo país del mundo con más infectados después de Estados Unidos.
El llamado número “R”, que indica cuántas personas se contagiarán en promedio por cada persona infectada, subió rápidamente a 1,8, precisó Clara de Bort, quien dirige la salud regional del territorio. Eso indica que cada persona infectada está transmitiendo el virus a casi otras dos personas.
Hablando el lunes en la radioemisora France-Info, de Bort agregó que las autoridades francesas sopesan colocar nuevamente a las 300.000 personas del territorio bajo un confinamiento social breve para volver a controlar el brote. Se espera que la epidemia en el territorio alcance su punto máximo en julio.
En Alemania, el portavoz de la canciller Angela Merkel dijo que “se necesita hacer todo lo que sea” para contener un brote de coronavirus relacionado con un enorme matadero donde más de 1.300 personas dieron positivo por COVID-19.
Steffen Seibert dijo que 20 trabajadores de la planta de carne Toennies, en la región occidental de Guetersloh, han sido hospitalizados y que varios están en cuidados intensivos.
El centro de control de enfermedades de Alemania dijo que el país ha registrado 190.359 casos confirmados y 8.885 muertes relacionadas con el virus, unos cinco veces menos decesos que en Gran Bretaña.
En Holanda, el instituto de salud pública dijo que no se han reportado muertes por COVID-19 en las últimas 24 horas, la primera vez desde el 12 de marzo que no se han registrado nuevos fallecimientos por la enfermedad.
La cifra oficial de muertes en Holanda por la pandemia es de 6.090. La cifra real es mayor porque no todas las personas que murieron con sospechas de COVID-19 se hicieron la prueba diagnóstica.