Buenos Aires, 20 jun (EFE).- Argentina fue escenario este sábado de marchas, bocinazos y cacerolazos que tuvieron lugar en varias ciudades contra la expropiación de la empresa agroexportadora Vicentín por parte del Gobierno de Alberto Fernández.
En el Obelisco de Buenos Aires, miles de personas se reunieron, muchas a pie y otras con sus automóviles, portando banderas argentinas en medio de la cuarentena por la pandemia de la COVID-19, para reclamar que el Estado dé marcha atrás con la expropiación de la compañía, originaria de la provincia Santa Fe (centro este).
POLÉMICA DESDE QUE EL GOBIERNO TOMÓ LA DECISIÓN
En esa provincia comenzaron las protestas hace unas semanas, cuando se conoció la decisión gubernamental, y también allí se produjeron manifestaciones este sábado, que es además el Día de la Bandera en Argentina.
Otros lugares como Córdoba (centro), Resistencia (Chaco, norte) y Salta (norte), se sumaron a la protesta.
El pasado 8 de junio, Fernández anunció la intervención y su decisión de enviar al Congreso un proyecto de ley para expropiar la compañía agroexportadora fundada hace casi cien años y originaria de la provincia de Santa Fe.
Este viernes, el Gobierno argentino avaló un proyecto alternativo del gobernador de la provincia de Santa Fe (centro este), Omar Perotti, para intervenir Vicentín sin llegar a la expropiación, que consiste en que la provincia de Santa Fe, utilizando la Inspección de Personas Jurídicas de Santa Fe, pase a administrar la empresa y llevar adelante su rescate.
REACCIÓN CONTRARIA DE CIUDADANOS
A las manifestaciones de este sábado acudieron personas autoconvocadas a través de redes sociales, aunque entidades del sector agropecuario y asociaciones como Campo Más Ciudad llamaron a concentrarse "en defensa de la propiedad" y decir "no a la expropiaciones".
Desde la oposición, en las pasadas semanas, también se ha criticado la medida de intervenir la empresa para buscar luego expropiarla.
"No me la van a expropiar", se leía en uno de los mensajes escritos sobre banderas argentinas en la manifestación de Buenos Aires, donde se reprodujeron los cacerolazos desde los balcones de gente que prefirió protestar sin salir de casa.
Los que protestaban desde los coches también llevaban colgadas enseñas nacionales.
La ciudad es en la actualidad, junto al resto del Área Metropolitana de Buenos Aires, el mayor foco de contagios de coronavirus en Argentina.
EL PRESIDENTE DEFIENDE EL PROYECTO DEL GOBERNADOR DE SANTA FE
Fernández dijo este sábado en declaraciones radiofónicas que, si el magistrado que lleva la causa del concurso de acreedores de Vicentín dice que no a la propuesta que presentó Perotti anoche, el único camino posible es "el de la expropiación".
"De ninguna manera hubo marcha atrás", defendió el jefe de Estado, quien aseveró que no pueden dejar "al frente de la empresa" a los accionistas actuales de Vicentín porque son "los causantes del problema".
Vicentín solicitó en febrero el concurso preventivo de acreedores con una deuda estimada en unos 1.350 millones de dólares y entre sus de acreedores están 2.600 productores agropecuarios, bancos públicos, liderados por el estatal Banco Nación, y un comité de acreedores extranjeros liderado por la Corporación Financiera Internacional (IFC, dependiente del Banco Mundial).