CARACAS (AP) — El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela suspendió a las cúpulas de dos de los principales partidos opositores y las dejó en manos de disidentes de esas organizaciones propinando un nuevo golpe a la oposición, que no ha logrado reponerse de la decisión del máximo tribunal de designar de manera unilateral a las autoridades electorales.
La Corte, que es controlada por el gobierno, suspendió a la actual directiva del partido Primero Justicia —encabezada por Julio Borges y el excanditado presidencial Henrique Capriles— y nombró una “junta directiva ad hoc” para que inicie un “proceso de reestructuración”, señaló el organismo en un comunicado que difundió el martes.
El máximo tribunal designó como presidente de la nueva directiva al diputado José Brito, un disidente del bloque opositor que fue expulsado a fines del año pasado de Primero Justicia tras ser acusado de recibir fondos del gobierno, señalamiento que ha rechazado.
A la “junta directiva ad hoc” se le otorgaron atribuciones para utilizar la tarjeta electoral, el logotipo, los símbolos, los emblemas y colores de Primero Justicia, señaló el escrito.
Al condenar la medida, Capriles acusó a la Corte de ocuparse de “la enferma ambición de poder de (Nicolás) Maduro”, y dijo en su cuenta de Twitter que los magistrados le entregaron Primero Justicia a unas “basurrillas corruptas”.
“No han podido lograr que se reconozca como legítimo a su régimen criminal, tampoco podrán por decreto engañar a la dirigencia, militancia y especialmente a los millones de venezolanos que nos han recibido”, expresó Primero Justicia en un texto que difundió en Twitter.
La decisión contra Primero Justicia se dio pocas horas después de una sentencia similar contra la directiva de Acción Democrática (AD), que también fue suspendida y reemplazada por una “mesa directiva ad hoc” para que realice una reestructuración.
En la sentencia se nombró presidente de AD a Bernabé Gutiérrez, quien entró en una abierta disputa con el jefe del partido, diputado Henry Ramos Allup, luego que su hermano, José Luis Gutiérrez, fuera nombrado por el Tribunal Supremo para integrar la nueva dirección del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Asimismo, los magistrados dieron la potestad a Bernabé Gutiérrez, quien se distanció de su partido, de utilizar la tarjeta electoral, el logotipo, los símbolos y el emblema y colores de AD que es junto a Primero Justicia, Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo una de las mayores fuerzas opositoras en Venezuela. Gutiérrez fue expulsado el martes de AD.
La sentencia se produjo días después de que Ramos Allup anunció que su organización no concurriría a procesos electorales convocados por el nuevo CNE, al que consideró “írrito”.
Ramos Allup dijo la noche del lunes en un comunicado que no acataría la sentencia de la Corte y atribuyó la medida a una acción del gobierno de Nicolás Maduro para “darle algún viso de credibilidad a la farsa electoral que tiene planeada efectuar este año”.
Agregó que “desprovisto de partidos políticos democráticos opositores que puedan competir en esas elecciones, ha decidido secuestrar, asaltar las tarjetas de los partidos políticos, valiéndose de sus bufetes mal denominados tribunales de justicia”.
A las críticas se sumó el líder opositor Juan Guaidó, quien acusó al gobierno de intentar desaparecer a AD.
Tras las medidas contra dos de los principales partidos opositores, Maduro anunció el martes que la nación suramericana se dirige a un "proceso electoral obligatorio” para elegir una nueva Asamblea Nacional, y llamó a los miembros del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela a preparar la maquinaria y a definir los candidatos para esa consulta.
El mandatario señaló a los dirigentes de AD, Primero Justicia y a Guaidó de haber fracasado al frente del Congreso, y aseguró que a través del voto los sacarán del órgano.
“Ellos han dicho que no van a elecciones, no van a las elecciones de la Asamblea Nacional porque saben que las tienen perdidas, se las ganamos de calle”, dijo Maduro, quien aprovechó un discurso que transmitió la televisora estatal para atacar a la Unión Europea por criticar el nombramiento del CNE por parte de la Corte y la sentencia contra AD.
“No se metan más con Venezuela”, indicó el gobernante al referirse a la UE, agregó que hace tiempo “derribamos las estatuas de los colonialistas”.
El Tribunal Supremo de Justicia ha tomado decisiones similares contra pequeñas organizaciones opositoras que se han dividido luego de que algunas de sus facciones terminaran aliadas al gobierno. Asimismo, las autoridades electorales inhabilitaron en 2018 a los cuatro mayores partidos del país para participar en las elecciones presidenciales de ese año en las que ganó Maduro.
La Corte nombró el 12 de junio a los directivos del CNE alegando que la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, incurrió en una omisión en el proceso de elección de las autoridades electorales que venía discutiendo desde hace varios meses.
El Congreso anunció el martes que desconocería los nombramientos y convocatorias electorales del nuevo CNE y seguiría adelante con el proceso de selección de las autoridades electorales.
El máximo tribunal designó a Indira Alfonzo y a Gladys Gutiérrez, ambas magistradas de la Corte; al excongresista Rafael Simón Jiménez; a Tania D’Amelio, actual miembro del Poder Electoral, y a José Luis Gutiérrez como nuevos miembros del CNE.
Alfonzo asumió el lunes como nueva presidenta del organismo electoral mientras que Jiménez quedó como vicepresidente y el resto como rectores principales. En 2018, Canadá incluyó a Alfonzo en una lista de funcionarios venezolanos sancionados por atentar contra la democracia y los derechos humanos.