La Copa de la FA, pospuesta por la pandemia, será rebautizada como una iniciativa encabezada por el príncipe Guillermo para luchar contra padecimientos mentales.
Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono británico, está preocupado por los retos psicológicos que se derivan de la crisis sanitaria por el coronavirus, que ha matado a 40.000 personas y ha obligado a muchas más a aislarse durante meses en Gran Bretaña.
Durante una videollamada con el plantel del Arsenal , Guillermo anunció que la final del 1 de agosto en el estadio de Wembley será conocida como “Heads Up FA Cup”, en vez de tener en su título el patrocinio de la aerolínea Emirates.
“Vamos a aprovechar realmente la final como un momento para promover la salud mental para todos”, comentó el príncipe. "Es algo bastante oportuno que tengamos en mente todo aquello por lo que hemos pasado con esta pandemia.
“Pienso que esto va a tener, tristemente, muchas repercusiones en la sociedad, no sólo en términos del fútbol sino de la salud mental de la gente. Ojalá que la Copa de la FA pueda ser un motivador alrededor del cual pueda reunirse la gente”.
La final de la copa debía haberse disputado en mayo, pero la competencia se suspendió en marzo, como buena parte del deporte en Inglaterra, para evitar una mayor propagación del padecimiento COVID-19.
Luego que Mikel Arteta, técnico español del Arsenal, contrajo el virus, la Liga Premier decidió parar. Está programado que la campaña se reanude el miércoles, luego de 100 días sin partidos.
Arteta está al tanto de la necesidad de hablar del bienestar mental con sus jugadores, quienes no pudieron entrenar juntos durante más de dos meses.
“Uno tiene que crear un ambiente seguro para que ellos sean capaces de hablarnos directamente sin sentirse juzgados y sin preocuparse de que habrá consecuencias para ellos, ya sea que jueguen o no”, dijo el estratega.
Recientemente, Guillermo apareció en un documental televisivo para mostrar la manera en que su iniciativa Heads Up está llamando la atención sobre la salud mental en el fútbol y alienta a los aficionados a contar sus problemas.