Pekín, 10 jun (EFE).- La Policía de Hong Kong detuvo hoy a 53 personas que consideró sospechosas de participar en asamblea ilegal y en una reunión no autorizada durante una protesta para conmemorar, este martes, el primer aniversario de las manifestaciones multitudinarias en Hong Kong y en la que se lanzó gas lacrimógeno.
En un comunicado remitido hoy a los medios, la Policía hongkonesa sostuvo que, este martes, "un gran grupo de manifestantes se reunió en el distrito Central. Bloquearon las calles y alborotaron. Levantaron barricadas con objetos diversos, paralizando el tráfico. La Policía se movilizó para dispersarles y les ordenó abandonar las calles".
Como algunos manifestantes desoyeron a los agentes, "la Policía llevo a cabo una operación de dispersión" que incluyó el uso de gas pimienta, y donde se produjeron 53 arrestos,36 hombres y 17 mujeres, en las primeras horas de este miércoles(hora GMT +8).
Desde hace más de un año, la situación en Hong Kong se ha ido deteriorando por el impacto de las protestas prodemocráticas en la economía de la ciudad semiautónoma donde el PIB local cayó un 2,8 % y un 3 % en los dos últimos trimestres de 2019, respectivamente, y un 8,9 % en el primero de 2020, al que este año se ha sumado la paralización motivada por la pandemia de coronavirus.
La situación política en la excolonia británica también está lejos de resolverse, con unos gobiernos, tanto en Pekín como en Hong Kong, poco dispuestos al diálogo o las concesiones, y con un movimiento prodemocrático que ha ganado nuevo impulso a raíz de la aprobación, el pasado día 4, de una ley que criminaliza las injurias al himno chino, y de una ley de seguridad aprobada por el Legislativo chino el mes pasado.
El citado texto legal tendría el objetivo de "salvaguardar la seguridad nacional" frente a la tan temida "injerencia extranjera" que Pekín ve en esas protestas, pero abogados y activistas creen que esa ley terminará por cercenar las libertades de que goza la ciudad.
La Declaración Chino-Británica de 1984, que articuló la retrocesión de Hong Kong de manos británicas a chinas en 1997, estableció el mantenimiento durante al menos 50 años a partir de esa fecha de una serie de libertades en este territorio inimaginables en la China continental.
No obstante, desde el Ministerio de Asuntos Exteriores de China, sus portavoces han dicho en numerosas ocasiones que ese documento se cumplió ya en su momento.