LONDRES, 4 jun (Reuters) - Cerca de 30.000 pruebas de diagnóstico de COVID-19 que Reino Unido envió a un laboratorio de Estados Unidos para ser procesadas tuvieron un resultado no válido, dijo el portavoz del primer ministro Boris Johnson, aumentando los interrogantes sobre el sistema de pruebas británico.
Este reconocimiento se produce en una semana en la que el Gobierno ha enfrentado las críticas de un organismo de control estadístico por los datos incompletos de las pruebas, la presión sobre los plazos de entrega de los resultados y los problemas iniciales con un nuevo programa de test y rastreo.
El portavoz de Johnson dijo el jueves que por "problemas operativos en nuestra red de laboratorios" se tuvieron que enviar 67.000 pruebas para ser procesadas en Estados Unidos.
"Desafortunadamente, las pruebas que Estados Unidos devolvió tienen una tasa de nulidad más alta de lo esperado. Se devolvieron con resultado fallido alrededor de 29.500 (pruebas)", dijo.
"A todos los afectados se les ofreció una nueva prueba inmediatamente. Y no se está utilizando más el laboratorio en Estados Unidos para ampliar la (...) capacidad", añadió.
El diario Telegraph citó al ministro de Sanidad, James Bethell, diciendo que Reino Unido había trabajado rápidamente para restaurar su capacidad.
"Trabajamos duro para conseguir pruebas completas para personas en circunstancias difíciles", dijo el funcionario al periódico.
"En muchos casos eso funcionó y estamos agradecidos al equipo por sus esfuerzos. Pero en algunos casos no lo hizo, y se tomó la decisión correcta de anular las pruebas."
El miércoles, Johnson se comprometió a que los resultados de casi todas las pruebas de COVID-19 estén disponibles en un plazo de 24 horas a finales de este mes, aunque dijo que habría dificultades con las pruebas por correo. (Información de William James y Alistair Smout; editado por Stephen Addison. Editado en español por Michael Susin)