ROMA (AP) — Mientras que las ligas de fútbol en toda Europa continúan debatiendo si deben y cuándo podrán volver a jugar debido a la pandemia de coronavirus, el líder de la Asociación de Federaciones de Medicina Deportiva del continente pidió que se establezcan una serie de pruebas para asegurar que los jugadores están en condiciones antes de volver a entrenar.
Maurizio Casasco, a la vez el presidente de la Federación de Medicina Deportiva de Italia, dijo que las pautas publicadas por su federación, deberían aplicarse en toda Europa _especialmente si la UEFA pretende reanudar la Liga de Campeones y la Liga Europa en los próximos meses.
“Se necesita un protocolo conjunto”, dijo Casasco en una entrevista con The Associated Press. “Tanto a nivel nacional como europeo. Si hay una competición en juego, las reglas deben ser las mismas para todos y no sólo en el fútbol si no en todos los deportes profesionales”.
El protocolo elaborado por la Federación italiana inicia dividiendo a los jugadores en dos categorías. El Grupo 1 para aquellos que ya dieron positivo por el COVID-19 o que tuvieron síntomas asociados al virus. El Grupo 2 para aquellos que no han dado positivo, incluyendo deportistas que estuvieron en contacto con quienes dieron positivo pero que no presentan síntomas.
Primero, los deportistas en ambos grupos serán sometidos a la prueba de coronavirus. Los deportistas que den negativo también ser evaluados para determinar inmunidad. Los que no sean inmunes serán sometidos a la prueba cada cuatro días.
Los deportistas del Grupo 1 tendrán que superar una prueba de fuerza en descanso, durante y después del ejercicio. Posteriormente serán sometidos a una ecografía doppler y después tendrán que utilizar un monitor Holter (un ecocardiograma de 24 horas), seguido de una prueba de espirometría pulmonar, pruebas de sangre completas, una radiografía de pulmones y finalmente una autorización diciendo que el deportista ya no está infectado.
Una vez que tengan autorización para entrenar, los deportistas del Grupo 1 tendrán que incrementar gradualmente su nivel de actividad en un periodo de observación de 15 días.
Los atletas en el Grupo 2 tendrán menos pruebas: fuerza, ecografía Doppler, espirometría pulmonar y de sangre.
Este protocolo fue establecido por una comisión de ocho personas que incluye al asistente de director general de la Organización Mundial de la Salud, Ranieri Guerra.
“Tendrá un costo, pero creo que lo tenemos que seguir”, indicó Casasco. “Trabajamos con los deportistas, pero las reglas también deben ser aplicadas para todo el equipo de entrenadores. Todos los que estén en contacto con el vestuario: utileros, fisioterapeutas, entrenadores y mánagers. Todos”.
Al menos 15 jugadores de la Serie A dieron positivo por el COVID-19 y médicos del Inter de Milán, Fiorentina y Sampdoria fueron hospitalizados por el virus.
El confinamiento ordenado por el gobierno en Italia está programado para terminar el 3 de mayo, por lo que sugirió que el protocolo de pruebas debe iniciar el 4 de mayo.
“No puedes empezar a entrenar hasta que todos hayan sido sometidos a pruebas, de otra forma te arriesgas a crear otro foco de infección”, dijo. “Y obviamente no puedes juntar a todos para realizar los exámenes. El protocolo debe ser ejecutado de forma individual antes de volver a los entrenamientos”.
Mientras los dirigentes de fútbol italiano han hablado de reanudar los entrenamientos el 4 de mayo, quizá en grupos pequeños al principio, el protocolo requiere de más días para que oficialmente empiecen las prácticas.
Casasco estimó que los deportistas necesitarán entre 20 y 25 días de entrenamiento para reanudar la competencia.
“No están completamente descansando. Probablemente están al 40% de capacidad física debido a que están entrenando en casa”, dijo. “No es como que estén sentados en la playa”.
La competencia conlleva a otros riesgos al tener a los deportistas en contacto con más personas en los partidos de visitante, incluso jugando en estadios vacíos.
Casasco también expresó cautela sobre disputar partidos muy seguidos y luego tener una breve pausa antes de iniciar la siguiente campaña.
“Esto incrementaría el riesgo de lesiones musculares”, dijo.
La pregunta más importante del protocolo es si lo seguirán o no. Aunque Casasco también lidera una comisión médica y científica que dispuso la Serie A para lidiar con la crisis de coronavirus, no hay ningún instrumento que obligue a la liga de fútbol o cualquier otra competencia de seguir el protocolo.
“No hemos aprobado leyes”, dijo Casasco. “Sólo somos una comisión científica que emitió recomendaciones y elaboró una guía”.
Pero Casasco sugirió que las ligas que no sigan el protocolo o algo similar abren la posibilidad de “ser cuestionados por su responsabilidad legal y médica”.
Mientras que los equipos de la Serie A están ansiosos de completar las 12 jornadas que faltan de la temporada para evitar perder millones de euros en ingresos, las autoridades sanitarias dudan en dar el visto bueno.
“El fútbol es un deporte de contacto por lo que conlleva un riesgo de transmisión”, comentó Guivanni Rezza, el director del departamento de enfermedades infecciosas del Instituto de Salud de Italia.
Rezza dijo que el monitoreo constante de jugadores es “demasiado” y agregó que no está de acuerdo en reanudar los torneos.
Sandra Zampa, subsecretaria de salud del gobierno, agregó que no cree que reanudar el fútbol “sea prioritario” y que no “habrán estadios llenos hasta que no haya una vacuna”.
Pero Casasco, quien también es presidente de la confederación de pequeñas y medias empresas privadas dijo que ir retomando las actividades es la manera de avanzar mientras los científicos trabajan en la vacuna.
“Creo que el virus tendrá una larga vida”, dijo. “Puedes combatir el virus con una vacuna o medicina o puedes combatir con las medidas de precaución establecidas pues nunca tendremos riesgo cero hasta que haya una vacuna”.