LOS ÁNGELES (AP) — El discreto divorcio entre Todd Gurley y los Rams dejó un enorme hueco en el centro de la ofensiva de Los Ángeles.
El coach Sean McVay y el gerente general Les Snead no creen que puedan cubrirlo con un solo running back.
Para la próxima temporada, los Rams pretenden depender menos de un solo corredor y más de un talentoso grupo de running backs, dijeron McVay y Snead el lunes en sus primeros comentarios públicos desde que realizaron su mayor movimiento de la pretemporada.
“Lo que queremos ser es un equipo que utilice más de un caballito de batalla al momento de correr el balón, tener diferentes tipos de habilidades y un ataque terrestre complementario”, comentó Snead. “Tenemos este panorama generalizado del que Darrell (Henderson) es parte, pero también anticipamos que encajen otras piezas”.
Henderson, quien apenas vio acción en su temporada de novato después de ser reclutado en la tercera ronda, es el principal candidato para reemplazar a Gurley, uno de los running backs más productivos de la NFL en el último lustro. El suplente Malcolm Brown también vuelve con el conjunto, y Snead indicó que los Rams podrían analizar la posición en el próximo draft.
Tener a un grupo activo de corredores será un gran cambio para los Rams, que durante los últimos cinco años colocaron a Gurley en el centro de prácticamente toda su ofensiva.
“Ciertamente no se reemplaza la producción, la manera en que influyó y afectó el juego”, dijo McVay. “Pero lo que podemos seguir haciendo es intentar ajustarnos y adaptarnos”.
Gurley, Jugador Ofensivo del Año de la AP en 2017, encabeza a la NFL con 58 touchdowns terrestres desde que llegó a la liga en 2015. Sus 5.404 yardas por tierra en ese lapso son una menos de las que ha acumula el líder de la NFL, Ezekiel Elliott.
Es demasiada producción por reemplazar, incluso después de que la productividad de Gurley tuvo un marcado descenso la campaña anterior debido a problemas con su rodilla izquierda. Cuestiones financieras y de producción llevaron a los Rams a darlo de baja el 19 de marzo, incluso antes de llegar al primer año de su extensión por cuatro campañas y 60 millones de dólares, la más grande en la historia de la NFL para un corredor cuando acordó el pacto en 2018.
Ese acuerdo, que incluía 45 millones de dólares en garantías, será recordado como uno de los peores errores tácticos en los ocho años de Snead con el equipo. Pero el gerente aún cree que hizo lo correcto en pagar tanto por su estrella.
“Desde el punto de vista del arrepentimiento, no lamentas las yardas que ganó ni los touchdowns que anotó para nosotros”, dijo Snead. “Los campeonatos, ya sean los dos títulos de división o el campeonato de conferencia. Su aparición en el Super Bowl. Eso sería difícil de lamentar. Lo que puedo decir es que, obviamente, creo que todos deseamos que esta sociedad hubiera durado más tiempo. Pero desde la perspectiva de que Todd se haya ganado ese contrato, no, él se lo ganó. Creo que se demuestra en la producción y en la forma en que nos ayudó a ganar”.
Gurley firmó por un año y 6 millones de dólares con los Falcons de Atlanta, acuerdo que se oficializó el lunes.