CIUDAD DE MÉXICO (AP) — México permitió a 46 ciudadanos británicos desembarcar de un crucero anclado frente a su costa caribeña para que regresaran en avión a su país y la operadora del barco, a cambio, pagó el vuelo de 141 mexicanos que quedaron varados en Inglaterra debido a las restricciones de viaje por el coronavirus, dijo el miércoles el gobierno mexicano.
El martes, la armada mexicana retiró a un pasajero en estado crítico del crucero Marella Explorer 2 para que lo atendieran de emergencia en territorio mexicano. El barco se encontraba anclado frente a Puerto Progreso, en el estado de Yucatán.
Los pasajeros retirados el miércoles del barco fueron llevados a Mérida, capital de Yucatán, y puestos en un vuelo fletado con destino a Londres. Todas las precauciones de salud fueron adoptadas, dijo el gobierno mexicano. La embajada británica en México dijo que “algunos de los pasajeros habían experimentado síntomas similares al COVID-19”.
Los gobiernos mexicano y británico coordinaron ambas operaciones con la operadora del crucero, Marella Cruises, que pertenece a la compañía británica TUI Travel.
Muchos pasajeros del barco al parecer desembarcaron y regresaron a sus países la semana pasada. Se desconoce cuántos continuaban a bordo.
El gobierno mexicano ha permitido a cruceros atracar y desembarcar pasajeros o miembros de la tripulación por motivos humanitarios.