Joe Biden, cuya vida ha estado marcada por los triunfos y la tragedia, está a un palmo de ganar la nominación demócrata para competir en las presidenciales, un sueño que se le escapó de las manos en dos ocasiones.
Político moderado de 77 años, está cerca de asegurarse la nominación del partido demócrata para enfrentarse a Trump en noviembre tras una serie de victorias en la primarias el martes frente a su rival, el senador de izquierda Bernie Sanders.
Biden, que destacó en su carrera política por ser uno de los senadores más jóvenes de la historia de Estados Unidos, fue vicepresidente durante los ocho años del gobierno de Barack Obama.
Sus dos intentos anteriores por llegar a la Casa Blanca, en 1988 y en 2008, terminaron en humillantes derrotas después de que el entonces senador por Delaware saldara su primera carrera sin ninguna victoria ni en las primarias ni en las asambleas.
Pero la segunda vez que aspiró a llegar a la Casa Blanca logró que Obama, el primer presidente negro de la historia de Estados Unidos, lo eligiera como segundo de a bordo.
Pese a que comenzó la carrera de las primarias en 2020 como favorito, su candidatura se tambaleó con una serie de derrotas en las tres primeras votaciones en Iowa, New Hampshire y Nevada.
Biden logró enmendar el rumbo con una victoria en Carolina del Sur gracias al voto crucial del electorado negro, una base clave para el partido demócrata.
Después, capitalizó esta victoria sumando 10 de los 14 estados que votaron en el supermartes el 3 de marzo y este martes acrecentó la brecha después de ganar en Misisipi, Misuri y Michigan.
- El escándalo ucraniano -
Su vida estuvo marcada por la tragedia: en 1972 perdió a su esposa y a su hija en un accidente automovilístico que también hirió gravemente a sus hijos Beau y Hunter. En 1977, se volvió a casar con Jill, con quien tiene una hija, Ashley.
Recién elegido como senador a los 30 años juró el cargo desde el hospital y recorrió todos los días los 200 kilómetros que separan a Washington de su hogar en Wilmington, Delaware, para estar con su familia.
Sus dos hijos se recuperaron del accidente y Beau siguió los pasos de su padre en el mundo de la política como fiscal general de Delaware, desde donde contemplaba presentarse a gobernador cuando le descubrieron un cáncer cerebral del que murió en 2015 cuando tenía 46 años.
En parte, Biden renunció a competir por la presidencia en 2016 porque estaba devastado por la muerte de su hijo.
Cuando el joven candidato centrista Pete Buttigieg abandonó la carrera y le dio su apoyo, Biden le dedicó un sentido cumplido afirmando que le recordaba a su hijo Beau.
Su hijo menor, Hunter, estuvo en el ojo del huracán el año pasado cuando estalló un escándalo luego de que Trump le pidiera a su homólogo ucraniano Volodimir Zelenski que investigara sus negocios en Ucrania.
Hunter ocupó la junta directiva de una empresa de gas ucraniana mientras Biden era vicepresidente, lo que arrastró acusaciones de corrupción por parte de Trump.
- Dudas sobre su agilidad mental -
Joseph Robinette Biden Junior nació y creció en Scranton, Pensilvania, en una familia católica y modesta irlandesa. Su padre era vendedor de autos.
Cuando era pequeño tartamudeaba, lo que le valía burlas crueles. Pero se las arregló para superarlo e incluso dijo que ahora lo veía como una bendición porque le acercaba "al dolor de otras personas".
Biden enfrentó cuestionamientos el año pasado por su trato notoriamente "táctil" con sus partidarios, especialmente con las mujeres, lo que podría haber socavado su credibilidad para desafiar a Trump en cuestiones de género, después de la irrupción del movimiento #MeToo.
El exvicepresidente dijo que lamentaba haber invadido el espacio de las mujeres que dijeron estar avergonzadas por sus expresiones de afecto, pero también defendió firmemente su proximidad con los electores.
También logró superar las dudas sobre su agilidad mental y el deterioro cognitivo tras varios exabruptos, olvidos y lapsus, el último de ellos cuando en pleno discurso del supermartes confundió a su esposa con su hermana mientras estaban los tres en el escenario.
Durante el gobierno de Obama se encargó de crisis importantes como la situación en Ucrania y en Irak e iniciativas importantes, como el presupuesto o el tema de las armas de fuego.
Aun así, puede que tenga que responder por algunas de sus votaciones en el Senado, como su apoyo a la guerra en Irak, una controvertida ley de seguridad que llenó las cárceles o una medida de desregulación bancaria.
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