NUEVA YORK (AP) — La actriz Mira Sorvino comenzó a llorar al describir su reacción al veredicto de culpable contra Harvey Weinstein: alivio porque el ex magnate del cine no quedará impune. Un poco de decepción porque fue absuelto de los cargos más serios por agresión sexual predatoria. Pero sobre todo gratitud con las seis acusadoras que fueron suficientemente valientes para testificar en la corte y con el jurado que les creyó.
“Harvey Weinstein ha afectado muchas de nuestras vidas, incluso en nuestras pesadillas, mucho tiempo después de que hizo lo que le hizo a cada una de nosotras”, dijo Sorvino poco después del veredicto del lunes, en una emotiva llamada telefónica con reporteros y otras acusadoras. “Finalmente hemos recuperado ese poder, hemos expuesto su maldad”, dijo con la voz entrecortada.
“Se pudrirá en la cárcel como se merece y nosotras comenzaremos a tener una especie de final”, dijo.
Para la acusadora Zoe Brock, el alivio era palpable, ella había “esperado lo peor”, dijo desde Nueva Zelanda, “porque para las víctimas de abuso sexual lo peor sigue pasando”. Brock dijo que temía que Weinstein no sólo sería totalmente absuelto, sino que “tendría un regreso e iría a los Oscar y volvería a ganar”.
“Pero eso no va a pasar”, dijo Brock, “porque ahora Harvey Weinstein ha sido declarado culpable por violador y ahora está en ... prisión y estoy muy contenta por eso”.
En un momento indiscutiblemente emblemático para el movimiento #MeToo, Weinstein fue sentenciado por violar a una aspirante a actriz en 2013 y abusar sexualmente de otra mujer en 2006, pero no fue declarado culpable de agresión sexual predatoria, un delito que podría haber implicado una sentencia de cadena perpetua. Ahora enfrenta una sentencia máxima de 25 años. Los abogados de Weinstein dijeron que apelarán y él afirma que todas sus relaciones sexuales fueron consensuadas.
Para la mayoría de las acusadoras la imagen más poderosa, capturada en dibujos de la corte, fue la del famoso productor siendo retirado con esposas.
“Por primera vez no estará sentado cómodamente”, dijo la actriz Rose McGowan, una de las primeras acusadoras de Weinstein. “Por primera vez sabrá lo que es tener el poder alrededor de tu cuello”.
McGowan dijo que el veredicto es “un gran paso al frente en la sanación colectiva”.
“Cada uno de las que denunciamos tenemos un nombre, tenemos una historia, tenemos una vida”, dijo McGowan. “Somos más que Weinstein. Pero hoy, gracias a mujeres valientes que desnudaron sus más profundas heridas para que el mundo las viera, él está en (la prisión de) Rikers Island”.
Aunque se esperaba que Weinstein fuera a Rikers Island, permanecía detenido el lunes por la noche en una unida en el hospital Bellevue. Recientemente le realizaron una cirugía en la espalda y sus abogados dijeron que necesita atención médica.
Varias acusadoras dijeron que el mayor triunfo es que finalmente se ha creído a las mujeres en sus acusaciones sobre abuso sexual.
“Tenemos una sensación renovada de fe en que a las mujeres se les creerá cuando denuncien”, dijo Caitlin Dulany. "Realmente esperábamos cambiar el mundo con esto y hoy es un buen indicador de que vamos por ese camino”.
“Es como si el cielo volviera a ser azul”, dijo.
Muchas hablaron de la necesidad de reforzar las leyes sobre abuso sexual. Entre ellas la actriz Rosanna Arquette.
“Ahora debemos buscar activamente fortalecer las leyes y cerrar esos vacíos legales en nuestro sistema penal”, dijo vía telefónica, “para que más casos de violación sean perseguidos y los violadores sean responsabilizados por sus crímenes. Pero hoy hay que enfocarnos en el progreso que se logró con este primer veredicto de culpable en la era del MeToo”.
Las acusadoras reconocieron especialmente a la actriz de “The Sopranos” Annabella Sciorra, cuyo testimonio llevó a que se presentaran los cargos de agresión sexual predatoria. Sciorra dijo en la corte que Weinstein entró irrumpió en el apartamento de ella, la violó y le practicó sexo oral por la fuerza en la década de 1990.
La actriz dijo que su testimonio fue “doloroso pero necesario”.
“Hablé por mí y con la fortaleza de las más de 80 víctimas de Harvey Weinstein en mi corazón”, dijo la actriz en un comunicado horas después de que fue anunciado el veredicto. “Nunca debemos arrepentirnos de romper el silencio”.
Sorvino, describió los lazos que se crearon entre las acusadoras, y dijo que recibió una llamada inesperada de Sciorra a finales de 2017, cuando Sorvino hizo por primera vez sus acusaciones contra Weinstein. Ambas se conocían desde hace años, pero no sabían que tenían esa conexión más oscura.
Hablaron por dos horas por teléfono, dijo Sorvino. Poco después Sciorra decidió contar su propia historia al periodista Ronan Farrow.
“La era de la impunidad de los hombres poderosos que violan se acabó”, dijo Sorvino. “Hicimos esto juntas”.