Actualiza con más declaraciones de la canciller boliviana ///La Paz, 23 Dic 2019 (AFP) - Bolivia señaló a México de "violar" las normas internas de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) al convocar a reuniones de ese organismo para enero sin consultar con La Paz, que ejerce la presidencia pro témpore, por lo que no descartó abandonar el bloque.La canciller boliviana, Karen Longaric, informó este lunes que entregó en La Paz una nota a los embajadores de países que integran la Celac, dando a conocer la posición de su país sobre las acciones que toma el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que debe asumir la presidencia del bloque en enero por un año."El gobierno de México está actuando al margen de los procedimientos para el funcionamiento orgánico de la Celac, desconociendo las atribuciones de la presidencia pro témpore de Bolivia", dice una nota firmada por Longaric.La jefa de la diplomacia boliviana acotó: "Vamos a estar pendientes de qué es lo que ocurre a futuro y si México rectifica su conducta de violación a las normas de procedimiento de la Celac". En función de eso, decidirán si su país se aparta o no del bloque regional."Nosotros no estamos anunciando la salida de Bolivia, estamos comunicando a todos los países miembros de la Celac (...) el accionar de México, alejado de toda norma de respeto a los estados y de injerencia en los asuntos internos de Bolivia", precisó.Una de las medidas que La Paz asume -dijo- es no asistir a una reunión para la que México convocó a los países de la Celac, el 9 de enero, preparatoria para cuando asuma la presidencia del bloque. Longaric fue enfática al señalar que le corresponde a La Paz llamar reuniones de la Celac y en su territorio. Las relaciones se tensaron entre los dos países por la decisión mexicana de otorgar asilo al expresidente Evo Morales, quien dimitió el 10 de noviembre, en medio de una convulsión social y denuncias de fraude electoral.Bolivia asumió en enero de este año en San Salvador la presidencia pro témpore de la Celac (creada en 2010) con la meta de promover un diálogo latinoamericano, aunque la labor del bloque estuvo prácticamente paralizada en los últimos años, así como la de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).A la par, en la región ha tomado una labor más gravitante el Grupo de Lima, que trata la crisis política en Venezuela, o Prosur, conformado en marzo pasado por ocho naciones sudamericanas y que pretende remplazar a Unasur.jac/lda