WASHINGTON (AP) — La oficina de investigaciones independientes del Pentágono analizará la legalidad de la presencia del ejército en la frontera sur que ordenó el gobierno del presidente Donald Trump, informó el martes un funcionario.
Glenn Fine, inspector general interino, anunció que esta investigación analizará varios aspectos de la misión fronteriza del ejército, que algunos en el Congreso consideran un uso inadecuado del mismo. Fine dijo que evaluará qué hacen los soldados en la frontera, qué entrenamiento recibieron para la misión y si su despliegue en la frontera es legal.
Durante más de un año, el gobierno ha enviado a varios miles de soldados en servicio a lo largo de la frontera para realizar varias misiones en relación con la campaña de Trump de reducir las entradas ilegales. Los soldados han erigido cercas de alambre, asistido con la supervisión fronteriza y realizado otras funciones de apoyo para el Departamento de Seguridad Nacional.
En una carta de septiembre dirigida a Fine, 33 miembros de la Cámara de Representantes solicitaron que se realizara una investigación de lo que califican como “uso incorrecto y politización” del ejército en la frontera. De acuerdo con la ley federal, el ejército no puede usarse para tareas policiales. La opinión del gobierno de Trump es que los soldados cumplen con un rol de seguridad nacional en la frontera.