PERTH, Australia (AP) — Una dañina humareda cubría Sydney el jueves mientras los incendios forestales ardían en el este y el sur de Australia.
Una densa mezcla de humo y contaminación envolvió la ciudad más poblada del país y apenas dejaba ver su emblemático perfil, dos días después de que la calidad del aire empezara a ser preocupante.
El humo provenía de unos 50 incendios forestales, la mayoría en el norte del estado, indicó el Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur. Los niveles de contaminación eran casi 10 veces superiores al estándar nacional.
“Se espera que el humo se mantenga varios días”, dijeron los bomberos.
Los fuegos han destruido más de 600 viviendas en el estado más poblado de Australia.
La temporada anual de incendios suele tocar techo en el verano austral, pero este año se ha adelantado tras un invierno inusualmente cálido y seco.
Se recomendó a la gente con problemas respiratorios o de corazón que se quedaran bajo techo y pidiera atención médica cuando fuera necesario.
Mientras tanto, el riesgo por los incendios se extendió y las autoridades declararon un alto riesgo en zonas del estado de Victoria, al sur. Es la primera vez en una década que se declaran un Código Rojo en Victoria, el nivel más alto de riesgo, y una prohibición a encender fuego en todo el estado.
También se elevó el nivel de riesgo a “grave” en el estado insular de Tasmania, al sur del territorio continental australiano. En Australia del Sur se han declarado más de 40 fuegos.