El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, está “muy alarmado” por el “conflicto armado interno” en Ecuador protagonizado por las bandas vinculadas al narcotráfico, dijo su portavoz el miércoles.
“El secretario general está muy alarmado por el deterioro de la situación en el país, así como por su impacto perturbador en las vidas de los ecuatorianos”, afirmó Stéphane Dujarric en su rueda de prensa diaria en Nueva York.
El vocero de la ONU acotó que Guterres “condena enérgicamente estos actos criminales de violencia” desatados en los últimos días y “envía un mensaje de solidaridad a los ecuatorianos”.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, aseguró este miércoles que su país se encuentra en estado de guerra tras las acciones violentas protagonizadas por bandas del crimen organizado que le llevó a declarar el conflicto armado interno, y anticipó que no piensa negociar ni ceder ante estos grupos, a los que su Gobierno ha calificado como “terroristas”.
“Estamos en un estado de guerra y no podemos ceder ante estos terroristas”, señaló Noboa en su primera intervención pública desde el estallido de esta crisis de inseguridad, iniciada con la fuga de la cárcel de Adolfo Macías ‘Fito’, líder de la banda criminal Los Choneros, antes de que fuese a ser trasladado y aislado en una cárcel de máxima seguridad.
En una entrevista a Radio Canela, Noboa afirmó que las acciones violentas de los últimos días son la respuestas de los grupos criminales ante las acciones que está tomando su administración para detener la escalada de inseguridad que ha hecho que Ecuador se sitúe como uno de los países más violentos del mundo.
Después de que el Ejecutivo haya declarado a estas bandas como objetivos militares, el mandatario consideró que estos grupos se lo pensarán dos veces antes de realizar acciones como la toma de las instalaciones de un canal de televisión como sucedió el martes.
Noboa agradeció la ayuda ofrecida por países como Estados Unidos, China, Israel, Perú, Argentina y Colombia, a cuyo Gobierno propuso que se haga cargo de alrededor de 1.500 presos colombianos que permanecen en las cárceles ecuatorianas, lo que les permitiría bajar el hacinamiento de las prisiones.
El mandatario decretó este lunes un estado de excepción en todo el país debido a la acción violenta de grupos de delincuencia organizada, sobre todo por disturbios en unas seis cárceles y la fuga de reos considerados de alta peligrosidad, entre ellos ‘Fito’ y Fabricio Colón Pico.
El incendio de vehículos, el secuestro y amenazas a agentes de policía y penitenciarios, ataques con explosivos y la irrupción de encapuchados armados al canal TC Televisión desbordó la situación en Ecuador, que el martes vivió una jornada de terror en este pulso entre el crimen organizado y el Estado que dejó al menos ocho muertos.
(Con información de AFP y EFE)