Blasfemia en Pakistán: ¿una licencia para atacar violentamente a cualquier minoría?

La blasfemia sirve como un escudo no solo para perseguir a los cristianos, sino también a otros musulmanes como es el caso de la Comunidad Musulmana Ahmadia

Guardar
Un barrio cristiano, un día
Un barrio cristiano, un día después de que los edificios de la iglesia y las casas fueran destrozadas por manifestantes en Jaranwala, Pakistán 17 de agosto 2023 (REUTERS)

La expresión “blasfemia” parece, en Pakistán, ser una licencia abierta para atacar violentamente a cualquier minoría. La vandalización de varias iglesias y hogares cristianos durante la última semana en Faisalabad, a plena luz del día, en reacción a la supuesta profanación del Corán por un joven cristiano es un ejemplo de ello. Esta noticia espantosa ha generado en mí, como musulmán, indignación y a la vez vergüenza. En este país asiático, que afirma enraizarse en la ley islámica, la acusación de blasfemia es una espiral que manifiesta cada vez con mayor frecuencia y más atrocidad su violencia.

Las imágenes de los ataques contra cristianos me hicieron acordar al brutal asesinato de Priyanth Kumara, un budista de Sri Lanka que trabajaba en Sialkot (Pakistán) y fue quemado por una turba públicamente por la misma acusación de haber deshonrado al libro sagrado del islam. Sin embargo, conforme la constitución pakistaní cualquier insulto o falta de respeto al islam, por medio de palabras, representación visible o cualquier insinuación es definido como blasfemia, cuyo castigo puede ser en un caso grave incluso la pena capital. Entonces, un individuo puede ser acusado de blasfemia solo por meros rumores o rencores personales, y las consecuencias son extremadamente graves.

Según un informe de Amnistía Internacional, la mayoría de los casos de blasfemia en Pakistán se basan en acusaciones falsas y en las últimas cuatro décadas un total de 494 musulmanes ahmadíes, 187 cristianos y 21 hindúes han sido condenados por esta causa. Solo en 2023, había al menos 53 personas detenidas en todo el país inculpadas por blasfemia, según la Comisión de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos.

Por otro lado, existe la amenaza de que los casos de presunta blasfemia a menudo se resuelven en Pakistán fuera de los tribunales, en actos de violencia masiva y ataques terroristas. En 2016, murieron más de 75 cristianos durante la celebración de Pascua en un parque público. Y en 2010, durante la oración de viernes en un ataque contra dos mezquitas de la Comunidad Ahmadía murieron cerca de 90 personas.

Vale señalar que en Pakistán la blasfemia sirve como un escudo no solo para perseguir a los cristianos, sino también a otros musulmanes como es el caso de la Comunidad Musulmana Ahmadia: que fue fundada en la India en el año 1889 por Mirza Ghulam Ahmad. Únicamente por la creencia de que el fundador de su comunidad es el Mesías Prometido, cuyo advenimiento fue profetizado en los últimos días por el profeta Muhammad para reformar a la humanidad, los Ahmadis son acusados de blasfemia y fueron declarados no musulmanes por la constitución nacional en 1974.

No obstante, lo más preocupante y doloroso en todo esto es que se justifica la blasfemia en nombre del islam, aunque en nuestra religión no existe ningún castigo por eso: No hay un solo versículo del Corán ni un solo incidente en toda la vida del Profeta Muhammad, el fundador del islam, donde él hubiera mostrado alguna reacción violenta o castigado a alguien debido a sus actos blasfemos. Al contrario, el profeta era un modelo en garantizar la libertad religiosa y en respetar la libertad de opinión. Él, con su propio ejemplo, nos enseñó cómo hay que responder a la maldad con bondad, al odio con paz y a los insultos con paciencia. No hay ningún permiso, ni justificación para que un musulmán tome la ley en su mano y responda violentamente, incluso a provocaciones o actos blasfemos. “Islam” literalmente significa “paz” y el Sagrado Corán enseña a respetar la dignidad de cada vida, sin distinción de religión o de etnia, y aclara que quien mata a un ser humano es como si hubiera matado a toda la humanidad. Además, el texto sagrado categóricamente ordena a sus seguidores preservar el honor de cada sinagoga, cada iglesia, cada mezquita y cada lugar de culto.

En síntesis, corresponde a cada musulmán que afirma amar el Corán y al Profeta Muhammad seguir sus enseñanzas, en vez de justificar falsamente en su nombre la violencia y el odio.

Marwan Sarwar Gill es Imam (teólogo islámico) y presidente de la Comunidad Musulmana Ahmadía en Argentina.

Seguir leyendo:

Guardar

Últimas Noticias

La belleza de la semana: el árbol de Navidad, la alegría de las fiestas

Papá Noel, el Niño Jesús, los Reyes Magos, la “Noche de paz, noche de amor”... todo se ha pintado durante siglos, pero a este particular detalle no se le ha dado el espacio que merece
La belleza de la semana:

El primer ministro de Georgia amenazó con cárcel a la presidenta Zurabishvili si no deja el poder antes del 29 de diciembre

El primer ministro destacó que la actual mandataria, quien instó al gobierno a consensuar una fecha para nuevas elecciones, debe respetar la Constitución y el Código Penal. Además, advirtió que su negativa a dejar el cargo podría derivar en “numerosos años de prisión”
El primer ministro de Georgia

José Mulino le respondió a Donald Trump por sus declaraciones sobre el Canal de Panamá: “La soberanía de nuestro país no es negociable”

El presidente panameño subrayó que la administración de la vía interoceánica se lleva a cabo bajo estrictos criterios técnicos y enfatizó que ningún otro país ejerce control directo o indirecto sobre ella
José Mulino le respondió a

Daniel Noboa ordenó intensificar la búsqueda de los cuatro menores desaparecidos hace dos semanas en Ecuador

El Legislativo, de mayoría opositora, convocó el lunes al ministro de Defensa Loffredo y a los jefes del Comando Conjunto de las fuerzas armadas y de la fuerza aérea para dar información sobre el caso
Daniel Noboa ordenó intensificar la

Benjamin Netanyahu advirtió que Israel actuará “con fuerza y determinación” contra los rebeldes hutíes de Yemen tras el ataque a Tel Aviv

Los insurgentes lanzaron un misil balístico contra territorio israelí, hiriendo a 16 personas y obligando a muchas otras a abandonar sus hogares antes del amanecer del sábado
Benjamin Netanyahu advirtió que Israel